- Algo más de un 25% de las ofertas de empleo que ha tramitado Lanbide en lo que va de año son puestos relacionados con la industria manufacturera o las actividades sanitarias y sociales. Entre enero y agosto, el servicio público vasco de empleo ha gestionado 4.127 demandas de empresas que buscan esos perfiles, que destacan como las profesiones cualificadas más solicitadas. Solo las denominadas actividades administrativas y servicios auxiliares -que engloban actividades de asesoramiento de empleo, alquiler, agencias de viajes, servicios a edificios y jardinería o actividades administrativas auxiliares a empresas- está teniendo más salida laboral que la industria y la sanidad, pero el espectro es tan amplio que se desvirtúa la comparación.

Las necesidades de las fábricas, que han aumentado a medida que avanza el año y la recuperación económica, han contribuido a normalizar el peso de la industria dentro de las demandas de empleo que las empresas presentan en las oficinas de Lanbide. En un contexto generalizado de baja contratación de personal, la industria solo supuso el año pasado un 11,4% del total de ofertas laborales, pero en los ocho primeros meses de este curso ya se ha situado en los estándares habituales, en torno al 15%.

Por una parte, el sector manufacturero ha ganado peso y las demandas de empleo acumuladas hasta agosto -2.176- ya superan las que se registraban el año pasado a finales de octubre. Pero además también hay un cambio de tendencia en las actividades sanitarias, que han dejado de ser tan necesarias a medida que ha avanzado la vacunación y se ha contenido el virus. De modo que la sanidad ha pasado de representar en agosto de 2020 un 19% de las ofertas de trabajo a situarse en el mismo periodo de este año en un 12%. Continúa por encima de los datos habituales, pero empieza a ceder. De ahí que la suma de la industria y la sanidad haya pasado de suponer un tercio de las demandas a representar una cuarta parte. Otro síntoma de normalización en la economía vasca.

No ocurre lo mismo con la hostelería que con 756 ofertas de empleo solo supone un 4,6% del total. Con los picos habituales en los picos de actividad en el sector, su cuota se acerca al 8% cuando no hay tensiones como las que generan las restricciones en todo lo relativo al ocio.

Esa situación continúa condicionando en general la evolución del sector servicios. Sin embargo, destaca el dinamismo de las ofertas de empleo en los concesionarios y talleres de reparación de vehículos. La educación y la administración pública también muestra un buen tono.

Bajando al detalle de las profesiones, destaca como grupo principal de ocupación más demandado, con 2.468 ofertas de empleo, el de los trabajadores no cualificados en servicios. Ese epígrafe engloba a los empleados domésticos, el personal de limpieza o los recogedores de residuos urbanos. En su caso apenas hay variación respecto al año pasado, las necesidades de contratación no han variado.

Si se nota en cambio más dinamismo en otras ocupaciones elementales, las que desarrollan los peones sin cualificación de industria, construcción y sector primario o los peones de transporte, descargadores y reponedores. Este grupo suma 1.722 demandas de empleo en los ocho primeros meses del año.

La siguiente profesión más demanda es el empleado de comercio y después el trabajador cualificado de la industria manufacturera, con 1.449 ofertas laborales gestionadas por Lanbide hasta agosto. Las demandas de trabajadores del servicio de salud ascienden a 1.102.

16.222

Lanbide ha tramitado entre enero y agosto algo más de 16.200 ofertas de empleo, lo que supone un 16,4% más que en el mismo periodo del año pasado.

2.176

Del total de los puestos ofertados, casi 2.180, el 13,4%, fueron realizados por empresas industriales. El sector ha recuperado su porcentaje tradicional.

1.951

Las ofertas de trabajo de actividades sanitarias y servicios sociales pasa de representar un 18,85% del total en 2020 a un 12% este año. La demanda de personal sanitario ha caído un 24%.