Google ha elegido Euskadi para instalar su nuevo cable submarino Grace Hopper, que conectará la playa de Arrietara (Sopela) con Nueva York, en Estados Unidos, y Bude, Reino Unido, y permitirá aumentar “la capacidad y la potencia” de sus servicios en todo Europa. Esta nueva infraestructura coloca una vez más a la localidad vizcaína en el mapa mundial de las comunicaciones, después de que en el año 2017 se pusiera en marcha el cable submarino Marea, de Microsoft y Facebook, que conecta la playa vasca con Virginia Beach, también en Estados Unidos.

El empalme en ambos casos se ha realizado bajo la dirección de Telxius, la filial de infraestructuras de telecomunicaciones de Telefónica, que tiene en la playa de Arrietara su estación de amarre, conectada a su vez con el hub de comunicaciones de Derio que opera la misma compañía. “Este cable sitúa a Sopela en los mapas de conectividad porque las condiciones son proclives para que se puedan amarrar otros (cables), y eso tiene un impacto sin duda en la economía local. En el mantenimiento de las infraestructuras, además, hay puestos de trabajo. Asimismo, hay demanda de competencias digitales avanzadas y, por lo tanto, eso revierte en crear un tejido productivo mas competitivo alrededor de las infraestructuras digitales”, explicó ayer Miguel Escasi, director de políticas públicas y relaciones internacionales de Google en España, presente en la inauguración de la instalación.

Tras el amarre en Sopela, se espera que este cable de 6.600 kilómetros llegue a Cornualles, en la costa británica, a finales de este año, y a Nueva York a comienzos de 2022. Una vez operativo, aumentará la capacidad global e impulsará servicios como Meet, Gmail y Google Cloud. Grace Hopper se convierte así en uno de los primeros cables que unirán Estados Unidos y Reino Unido desde 2003.

“Este cable que va a dar un mejor servicio a todos los europeos en actividades tan cotidianas como buscar en Google Maps o un servicio de videoconferencia. Además, las empresas aumentarán la velocidad de sus computaciones, que son importantísimas a día de hoy para la producción empresarial”, señaló Escasi. “Este cable tiene una gran capacidad, hablamos de 340 terabytes por segundo, que equivale aproximadamente a 17,5 millones de personas transmitiendo 4.000 vídeos a la vez, con lo cual el cable aporta claras ventajas: una menor latencia, mayor velocidad de tráfico, mayor resiliencia, flexibilidad de la red y una capa extraadional de seguridad de lo que hay hoy en día en la red pública de internet”, señaló, por su parte, María Álvarez, responsable de Relaciones Institucionales Google Cloud Iberia.

“Desde el punto de vista del Gobierno Vasco y la Diputación Foral de Bizkaia es una gran noticia que este cable llegue a Sopela, no solo para que cada uno de nosotros y nosotras pueda enviar sus mensajes, sus vídeos y demás, sino porque somos un pueblo industrial, basado en un tipo de tejido que necesita respuestas importantes y esta es una infraestructura que da este tipo de respuesta”, manifestó durante el acto la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia.

“Hoy en día nuestras empresas multilocalizadas trabajan en la nube, trabajan conectándose con China, Estados Unidos, y esto no se hace si no se tienen este tipo de infraestructuras que son imprescindibles para que funcione bien”, subrayó. Tapia señaló, asimismo, que “esa apuesta por la parte industrial se complementa con que todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de este país, vivan donde vivan, en una gran capital o vivan en el último Baserri en el monte tengan una fibra óptica adecuada y unas condiciones que les permitan desarrollar su vida profesional y su vida personal exactamente igual que en cualquier otro lugar”. En Euskadi, según la consejera, se está apostando “por un equilibrio territorial que no se produce en ningún otro lugar”.

Por último, Tapia destacó que a todo ello se une “la apuesta fiscal y el acompañamiento fiscal que requiere todo este tipo de actuaciones”. Y es que este tipo de infraestructuras colocan a Sopela y a Bizkaia como un punto estratégico en el mundo de la conectividad, un escenario que abre un abanico de oportunidades para las empresas locales.

Con esta infraestructura, el Estado también da un paso más en su intento de convertirse en centro neurálgico de interconexión de decenas de cables submarinos para servicios de telecomunicaciones. “Tenemos 27 cables submarinos que amarran en España, la mayoría en Algeciras, Barcelona y ahora Sopela. Y queremos promover esto, hay una acción promovida por el Ministerio (de Asuntos Económicos y Transición Digital) para que España se convierta en un gran cruce de caminos de datos, donde tengamos multitud de cables submarinos, enlace satélite, telepuertos y también grandes centros de datos”, informó Arturo Azcorra, director general de Telecomunicaciones y ordenación de los servicios de comunicación audiovisual del ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.

“El cable sitúa en los mapas de conectividad a Sopela y eso tiene un impacto en su economía”

Responsable de Google

“Estas infraestructuras son imprescindibles para el funcionamiento de nuestras empresas”

Consejera de Asuntos Económicos

“Su capacidad equivale a 17,5 millones de personas transmitiendo 4.000 vídeos a la vez”

Responsable de Google Cloud