- “El Gobierno se hace cargo de la preocupación social. Y estamos trabajando con un plan para llegar a un compromiso concreto, y es que a final de 2021 los españoles echen la vista atrás y vean que han pagado en la factura de la luz una cuantía similar y semejante a la que pagaron en 2018. Ese es el objetivo y el compromiso: que todos los ciudadanos con un consumo medio al final de 2021 paguen una cuantía semejante y similar a la que pagaron en 2018, lógicamente con el IPC descontado”. Estas declaraciones del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, durante una entrevista en el diario El País, provocaron ayer una cascada de reacciones.

Una de las primeras llegó desde las filas de su socio de colación, Unidas Podemos. La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se mostró satisfecha con el compromiso asumido por Sánchez, quien recordó que en el año de referencia señalado por el presidente del Gobierno el megavatio hora, aunque mucho más barato que el actual, “tenía un precio muy elevado y estaba a 57 euros”. A pesar de su carestía, ese precio está muy por debajo de los que se están registrando durante los últimos meses y por eso parece difícil de comprender el compromiso de Sánchez. El precio medio de la electricidad en el mercado mayorista (pool) se sitúa para hoy en 132,65 euros/MWh en un marco de récord históricos.

Desde la oposición, la diputada y miembro de la Ejecutiva Nacional de Ciudadanos, María del Carmen Martínez, preguntó a Sánchez “cómo van a hacer” para que a finales de 2021 los ciudadanos paguen por la luz lo mismo que en 2018, cuando “a día de hoy siguen sin dar ninguna solución a la escalada de precios históricos máximos que estamos teniendo, y que está afectando directamente a todos los ciudadanos, empresas, autónomos y comercios”. Martínez subrayó que “desde Ciudadanos creemos que se trata de un asunto de especial importancia al que no se le está dando, desde el Gobierno de España, soluciones reales que ayuden a minimizar el impacto que tanto en las familias, autónomos y pymes están teniendo estas semanas”.

Por su parte, la exministra y vicepresidenta Sectorial del PP, Elvira Rodríguez, calificó de “sorprendente” la afirmación de Sánchez. “¿Se cree que somos tontos? Ya está bien de milongas, presidente”, afirmó. También desde el PP, Pablo Casado, criticó que Sánchez pidiese la dimisión de Mariano Rajoy “si la luz subía el 8% y con él sube el 200%”.

Sobre la tarifa eléctrica, Sánchez explica que “una cosa es la evolución del precio mayorista del mercado de la energía y otra cosa es el recibo de la luz”. “El recibo lo pagamos mensualmente. Lo que no tiene sentido es plantear el debate a diario, porque no pagamos la luz a diario”. Lo que puede hacer el Gobierno es, según el presidente del Gobierno, amortiguar la evolución de ese precio mayorista. “Primero, con reformas estructurales, con una apuesta decidida por las energías renovables, no solo por cuestiones de cambio climático, sino porque es más barata”. El jefe del Ejecutivo afirma que “los mercados de futuro eléctricos están ya diciendo que España, en 2022 y 2023, gracias a las renovables, va a tener unos precios inferiores a Francia y a Alemania”.

Otro miembro del Gobierno que ayer habló sobre la tarifa de la luz fue el ministro de Consumo, Alberto Garzón, quien insistió en las propuestas de Unidas Podemos como la regulación de los precios y la intervención del mercado eléctrico mediante la creación de una empresa pública de energía. Con respecto a fijar precios, una medida a la que ya se opuso la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, el ministro señaló que “este es el debate que hay abierto ahora mismo en el Parlamento, en los grupos parlamentarios, en los partidos políticos y que tiene su reflejo también en el Gobierno de coalición”.

Sobre la intervención del mercado, defendió que hay “muchas formas de hacerlo”, desde la fórmula más conocida y “caricaturizada”, en su opinión, como es la de la nacionalización, hasta la fórmula de “ir recogiendo el final de las concesiones, que son a lo largo de muchos años, pero empiezan ya el año que viene, ir acumulando todo ese potencial y esos mecanismos e instrumentos en un actor público”. Sin embargo, Sánchez asegura que el asunto de crear una empresa pública eléctrica se discutió en el programa de coalición “y quedó fuera”. “No forma parte del acuerdo de coalición. Por tanto, el Gobierno no se siente concernido por esa propuesta”, indica.

Garzón habló también sobre que la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) haya reconocido que algunas empresas han inflado la factura a sus clientes aprovechando la subida del precio de la luz. Sin embargo, el organismo regulador no dice qué empresas han sido. “Cuando las empresas cometen algún tipo de abuso y está demostrado, es decir, que tenemos suficientes indicios, es importante que se sepa quiénes son. Es muy importante porque es un aviso a navegantes. Esto es esencial para que la impunidad no reine, especialmente en mercados que son tan complejos que existen tantas facturas distintas, tantos contratos, tantas formas distintas de confundir a la gente”, señaló al respecto.

“El compromiso es que los ciudadanos paguen a final de 2021 una cuantía similar a la de 2018”

Presidente del Gobierno español