- El precio de la factura de la luz sigue rompiendo techos y marcando cifras de récord. Tras registrar en junio 81,27 euros, todo parece indicar que el de este mes será el tercer recibo más caro a nivel histórico para el usuario medio -con 4,4 kW de potencia contratada y un consumo de 366 kWh mensuales-. El análisis de Facua sobre la evolución de la tarifa semirregulada (PVPC) en los primeros 21 días de julio muestra que, de seguir así, la factura mensual se situará en 84,87 euros, 22,20 euros más que en el mismo mes del año pasado, cuando fue de 62,67 euros. Estos datos reflejan una subida del 35,4%.

Si estas cifras se confirman, el de julio será el tercer recibo más caro a nivel histórico para el usuario medio. De hecho, hasta la fecha, las cinco facturas más elevadas han sido los 88,66 euros del primer trimestre de 2012, los 87,81 euros de enero de 2017, los 83,55 euros de septiembre de 2018, los 82,13 euros de mayo de 2021 y los 81,55 euros de febrero de 2021. La asociación de consumidores estima, asimismo, que la bajada del IVA al 10% hasta diciembre mientras el precio medio del megavatio esté por encima de los 45 euros ha amortiguado la subida en 8,44 euros y que si se siguiera aplicando el 21%, el recibo habría batido todos los récords, alcanzando los 92,79 euros.

Precisamente ayer, el precio medio de la luz en el mercado mayorista tocó un nuevo máximo histórico, alcanzando una media de 106,57 euros por megavatio hora (MWh), con algunos puntos del día en los que se llegó a sobrepasar los 110 euros. Estas cifras suponen un encarecimiento del 4,6% con respecto al día anterior. Hay que tener en cuenta que las oscilaciones en el precio diario afectan a los consumidores acogidos a la tarifa PVPC, algo más de 10 millones, mientras que están exentos los que están en el mercado libre -unos 17 millones-.

El precio de la energía tiene un peso cercano en la factura de en torno al 24% mientras que alrededor del 50-55% corresponde a los peajes -el coste de las redes de transporte y distribución- y cargos -los costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa-, y el resto, impuestos. Precisamente, el pasado 24 de junio, el Gobierno español aprobó un decreto ley por urgencia para bajar el IVA de la luz del 21% al 10% hasta finales de este año y suspender el impuesto del 7% a la generación eléctrica durante tres meses. “Hemos hecho todo lo que está en nuestra mano (para bajar la factura de la luz), el resto depende de otros factores y se está trabajando con ellos en la UE. Esperemos que este pico se reduzca en los próximos días”, señaló ayer el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. “Lo que puede hacer el Gobierno es lo que hemos hecho, que es bajar el IVA”, subrayó. Bolaños destacó que hay causas que son “ajenas” al Ejecutivo, como es el precio internacional del gas y el de las emisiones de CO2.

Al respecto, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, explicó ante el Congreso que el actual diseño del mercado eléctrico responde a directrices europeas y que ya ha planteado por carta a la Comisión Europea la necesidad de facilitar cambios. Es más, defendió un “debate profundo sobre el funcionamiento del mercado actual” en la UE.

Ribera reconoció que esta tendencia en el alza de los precios “no parece despejarse en los próximos meses”. “Por ello, todas las medidas que estén a nuestro alcance para mitigar el impacto regresivo de estos precios deben ser impulsadas”, defendió. La ministra explicó que el precio del gas se ha encarecido un 10% en apenas siete días, dentro de una escalada a nivel global vinculada a la recuperación y a la mayor demanda de los últimos meses. También los precios de derechos de CO2 que, ha dicho, debe ser un “instrumento facilitador” para el cambio de inversiones, y “no una guillotina para los consumidores”, algo también que debe abordarse en el debate comunitario.

101,5

El precio medio de la luz en el mercado mayorista bajará hoy un 4,7%, situándose en los 101,52 euros por MWh. A pesar del descenso, será el cuarto más caro de la historia.

Un 18,4% menos. Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 1.531,3 millones de euros en el primer semestre del año, lo que representa una caída del 18,4% con respecto a las ganancias de 1.876,4 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior, debido al impacto del incremento del Impuesto de Sociedades en Reino Unido para 2023, así como por las plusvalías de casi 500 millones de euros que se anotó el año pasado por la venta de su participación en Siemens Gamesa. El impacto por el incremento de la fiscalidad en Reino Unido, que pasará el Impuesto de Sociedades del 19% al 25% y que afecta en el ejercicio actual a los impuestos diferidos, asciende a 461 millones de euros, aunque no es recurrente y no representa salida de caja. Sin considerar este impacto extraordinario en 2020, el beneficio neto ajustado de la compañía creció de enero a junio un 8,4%, hasta los 1.844,4 millones de euros.