Las líneas de montaje de la factoría de Mercedes Benz en la capital alavesa vuelven hoy a la actividad tras 17 días de descanso navideño disfrutado por los más de cinco mil operarios de la multinacional. A las seis de la mañana arranca el nuevo año donde la dirección ha fijado el listón en las 131.500 unidades como objetivo, aunque la inestabilidad en el panorama internacional y en el sector de la automoción puede llevar a revisar a la baja este dato de producción a lo largo de los doce meses. Así sucedió en el recién finalizado 2020, cuando se situó en 152.200 el número de vehículos, de los modelos Vito y Clase V, que se pensaban producir en ese atípico año. Finalmente, los efectos del coronavirus y contratiempos aparecidos en la homologación de motores y la normativa WLTP obligaron a sucesivos reajustes, que llevaron finalmente a ser 125.000 las unidades que salieron de la planta de la calle Las Arenas, un 17,87% menos de las inicialmente previstas. El último ajuste llegó en el mes de noviembre, con la rebaja de 1.400 unidades por diferentes pedidos que no llegaron a cristalizarse, aunque la previsión es que ese cupo de vehículos se recuperen a lo largo de este año.

En las diferentes comunicaciones lanzadas en los últimos meses por la dirección que encabeza Emilio Titos se ha aludido a los factores de "inestabilidad e incertidumbre" de los mercados internacionales como elementos que van a marcar la actividad y pueden ser los motivos que obliguen a retocar esa cantidad de las 131.500 unidades.

El inicio productivo del año va a estar también marcado por la puesta en marcha durante el primer trimestre de un sistema de trabajo de 2,5 turnos, donde los operarios del turno de noche van a ver recortada su presencia a pie de línea de montaje. Como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, en su edición del pasado 10 de noviembre, la dirección anunció a la plantilla la decisión de aplicar, desde enero a marzo, un ajuste en la capacidad productiva de los turnos, "reduciendo la velocidad de fabricación de uno de ellos". De esta forma se pretende rebajar desde las cerca de 700 unidades que se ensamblan cada jornada hasta las 570. Este ritmo de producción o tacto, como se conoce en el argot técnico de los trabajadores de la planta, se aplicará de forma rotatoria entre los tres turnos a lo largo de ese primer trimestre. Los trabajadores asignados al turno con tacto diferente, "trabajarán exactamente con la misma actividad y con la misma carga de trabajo que el resto de trabajadores". De la misma manera, las pausas de cada uno de ellos se mantendrá exactamente igual y el salario "no se verá afectado para ningún trabajador", remarca el documento.

El nuevo año llega también envuelto en un ambiente laboral enrarecido al haberse dado ya los primeros despidos entre los trabajadores eventuales de Mercedes Benz, a los que no se ha renovado sus contratos aludiendo a esos ajustes en la producción a los que se ve obligada la multinacional ante la inestabilidad del mercado internacional. La lista final de trabajadores afectados se eleva al medio millar y también se han conocido los primeros despidos en las empresas situadas en el parque de proveedores. También se ha anunciado a la plantilla la activación de los próximos cuatro sábados del mes de enero, días 9, 16, 23 y 30, que van a ser laborales en la planta vitoriana y se baraja la posibilidad de que también sean extensivos al resto de sábados hasta el mes de marzo. En el horizonte cercano emerge también la negociación del nuevo convenio colectivo para los trabajadores, después de que con el fin de 2020 expirara el anterior documento que regulaba sus condiciones laborales..