- El Ministerio de Trabajo y Economía Social propone prorrogar automáticamente los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) hasta el 31 de diciembre de este año y limitar los de fuerza mayor a empresas de una serie de actividades económicas especialmente afectadas y a negocios que dependan de estas, al tiempo que se mantendrá la prohibición de despedir tras los ERTE hasta final de año.
Así figura en el borrador presentado por Trabajo a los agentes sociales en el marco de la negociación para extender los ERTE más allá del 30 de septiembre, en el que se recogen las propuestas del Gobierno para la prórroga de los ERTE, paraguas bajo el que se encuentran 700.000 trabajadores.
El borrador de Trabajo también extiende hasta el 31 de diciembre la interrupción del cómputo de los contratos temporales, tanto de la duración de estos contratos, como de los periodos de referencia equivalentes al periodo suspendido. A su vez se amplía el derecho de adaptación y/o reducción de la jornada para el cuidado de menores, aparejado a reducción salarial, el conocido como plan Me Cuida.
Trabajo señala que se entenderá por empresas dependientes, y por tanto podrán continuar con un ERTE de fuerza mayor, aquellas cuya facturación, durante el año 2019, se haya generado, al menos, en un 50%, en operaciones realizadas de forma directa con empresas incluidas en ellos.
El documento de borrador entregado esta semana por Trabajo a los agentes sociales recoge el fin del contador a cero, una medida rechazada por la patronal y los sindicatos al suponer que las prestaciones que consuman los afectados por ERTE restarían para periodos futuros de paro.
"Cuando los trabajadores que, una vez finalizado el ERTE, accedan a una prestación contributiva por haber extinguido una relación laboral antes del 31 de diciembre del 2021, verán reducida la duración del nuevo derecho en tantos días como hayan percibido de prestación durante el ERTE desde el 1 de octubre", establece el borrador.