- Los bancos de la zona euro cuentan con la capacidad para resistir al estrés causado por la pandemia de covid-19, aunque en el caso de un significativo agravamiento de la situación varias entidades podrían verse en dificultades para seguir cumpliendo con sus requisitos mínimos de capital y deberían tomar medidas al respecto, aunque a nivel general el déficit permanecería contenido, según revelan las pruebas de vulnerabilidad a las que el Banco Central Europeo (BCE) ha sometido al sector.
Este examen evaluó cómo el impacto económico causado por el coronavirus afectaría a 86 bancos de la zona del euro y tuvo como objetivo identificar vulnerabilidades potenciales dentro del sector bancario en un horizonte de tres años. "En general, los resultados muestran que el sector bancario de la zona del euro puede soportar el estrés inducido por la pandemia", subrayó la institución.
El análisis de vulnerabilidad del BCE se centró en dos escenarios establecidos en las proyecciones macroeconómicas de la institución. El escenario central, más probable que se materialice, prevé que el producto interno bruto (PIB) real en la zona del euro disminuya un 8,7% en 2020, con un crecimiento del 5,2% y del 3,3% en 2021 y 2022, respectivamente. Por su parte, el escenario severo de la crisis, prevé una disminución del PIB real del 12,6% en 2020 y un crecimiento del PIB del 3,3% y 3,8% en 2021 y 2022, respectivamente.
Estos supuestos recogen también el impacto de las medidas de alivio monetario, fiscal y de supervisión tomadas en respuesta a la crisis del coronavirus, incluyendo los planes nacionales de protección laboral, las medidas de apoyo fiscal, avales y las medidas de auxilio operativas por parte de la Supervisión Bancaria del BCE.
"Los resultados muestran lo importante que fue que los bancos fortalecieran su posición de capital en los últimos años como resultado de las reformas regulatorias posteriores a la crisis financiera", señaló Andrea Enria, presidente del Consejo de Supervisión del BCE, quien ha subrayado que la coordinación de políticas y las medidas de apoyo han ayudado ya a mitigar el impacto de la pandemia en la economía.