madrid - La lucha contra el fraude laboral en sus múltiples facetas es otro de los pilares del conjunto de medidas de empleo del Gobierno PSOE-Podemos. Tanto para combatir la temporalidad fraudulenta y las jornadas excesivas como para atajar el problema de los falsos autónomos, el Ejecutivo de coalición plantea reforzar el papel de la Inspección, un objetivo marcado en rojo también entre los pilares de la reforma de 2012 pero que con el paso de los años se ha ido quedando en buenas intenciones.
El Gobierno de Rajoy anunció hace ocho años un plan especial para dotar de más recursos a los inspectores y poder aflorar situaciones laborales fraudulentas y, en especial, la economía sumergida. Ese objetivo se ha trasladado también al Gobierno Vasco, que tiene ciertas competencias en la materia, a través de planes específicos para detectar jornadas de trabajo superiores a las establecidas en los contratos parciales. El año pasado los inspectores dependientes del Gobierno Vasco obligaron a regular más de 6.000 contratos tanto por abuso de la temporalidad como por jornadas parciales irreales.
Por otro lado, la cuestión de los falsos autónomos ha abierto un debate específico. La oleada de sentencias obligando a plataformas digitales como Glovo o Deliveroo a pagar como asalariados y no como autónomos a sus repartidores ha hecho aun más evidente un fraude que se reproduce en otros sectores, si bien su magnitud real no está clara. Las asociaciones de autónomos dan cifras que van desde los 80.000 hasta los 250.000 falsos autónomos en España, aunque los sindicatos hacen estimaciones más elevadas.
En ese sentido, el nuevo Gobierno ya ha dejado claro que prepara una ley para poner orden en este asunto. "Un joven en bicicleta con un móvil no es un trabajador autónomo sino una verdadera persona asalariada", ha dicho la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de Podemos. De momento no hay fecha para la aprobación de esta nueva regulación ni se conoce dónde se establecerá la línea que separa el trabajo autónomo del de un trabajador por cuenta ajena.