Vitoria. La Encuesta Anual de Coste Laboral publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revela que Euskadi encabeza la clasificación con los costes más caros y es la segunda autonomía en la que más aumentaron, solo por detrás de Baleares donde el ascenso respecto a 2017 fue del 3,4 %.

Por detrás de Baleares y el País Vasco (2,9 % de incremento) se situó Cataluña (2,3), todas ellas muy lejos del aumento medio nacional que se cifró en el 1,1 %, con un coste neto medio por trabajador y año de 30.883,44 euros.

El aumento interanual en Euskadi supone 1.033 euros más de coste total respecto a 2017 y 5.700 euros por encima de la media nacional en 2018.

El coste bruto por trabajador y año en Euskadi, que excluye las dietas y los gastos de viaje, fue de 36.837 euros. De este importe, la principal partida es la de sueldos y salarios, que asciende a 27.127,33 euros, seguida de las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social, que alcanzaron los 8.664,42 euros por empleado, la más alta de España.

Las cotizaciones voluntarias medias fueron en Euskadi de 339,15 -también la más elevada del país- a lo que se suman las prestaciones sociales directas (285,27), otros gastos de carácter social como indemnizaciones por despido, gastos en formación profesional y pagos compensatorios que fueron de 420,83 euros por trabajador en 2018 y a ello se restan las subvenciones y deducciones de 252,74 euros.

Esto significa que el pasado año el salario medio de los vascos suponía el 73,64 % del coste total y que las cotizaciones obligatorias representaron el 23,52 %.