madrid - La Bolsa española cerró el pasado 2017 con la mayor revalorización desde 2013 pues los 10.044 puntos con que finalizó el viernes 29 de diciembre, la última sesión del año, representó una revalorización anual del 7,4%.
Todo ello en un ejercicio que a nivel doméstico, en el Estado español, estuvo marcado por las incertidumbres derivadas de la crisis política en Catalunya a raíz de la celebración del referéndum del pasado 1 de octubre, la declaración unilateral de independencia y a la aplicación, por primera vez en la historia, del artículo 155 de la Constitución española, por el que Madrid intervenía una Comunidad Autónoma.
En este contexto, el selectivo que agrupa a las 35 empresas más importante del mercado bursátil del Estado español consiguió revalorizarse el citado 7,4%, lo que supone su mayor alza anual desde el año 2013, ejercicio en el que la Bolsa repuntó un 21,41%.
Como se recordará, y a modo de comparación, en 2014, la Bolsa española creció un 3,66%, mientras que en 2015 y 2016 se devaluó un 7,15% y un 2,01%, respectivamente.
En cualquier caso, y en un escenario económico mundial estabilizado, sí parece que la crisis catalana ha lastrado el comportamiento del mercado bursátil en el Estado español, pues no hay que olvidar que en la primera parte del año 2017, con datos del pasado mes de mayo, se acumulaba un repunte anual del 19,06%. Teniendo en cuenta que el cierre ha estado casi 12 puntos por debajo, sin grandes cambios en los mercados exteriores, se puede deducir que la tensión política influyó negativamente en el índice de referencia de los mercados españoles durante los últimos meses del ejercicio.
Así las cosas, la revalorización de los mercado bursátiles en el Estado español se situó por debajo de la media de los principales países europeos. Así frente al 7,4% de alza del Ibex-35, el Ftse Mib de Milán se revalorizó un 13,61%; el Dax de Fráncfort, un 12,51%; el Cax 40 de París, un 9,26% y el Ftse 100 de Londres un 7,63%. - DNA