BILBAO - El lehendakari descartó ayer que exista una “una brecha” en el PNV en materia de fiscalidad. En esa línea, defendió que la reforma tributaria que está negociando su partido debe entenderse de manera “integral” ya que “no es suficiente mirar sólo el IRPF o el Impuesto de Sociedades” y, dentro de este tributo, “el tipo nominal y el efectivo”.

En su intervención en el Forum Europa-Tribuna Euskadi en Bilbao, Iñigo Urkullu recordó que el “compromiso” del Gobierno Vasco es que, tras evaluar la reforma fiscal de 2014 que nació con “un amplio consenso”, se logre un nuevo acuerdo fiscal que “no traslade a las rentas medias y bajas una merma de sus ingresos” y que se favorezca “la competitividad de las empresas”. Urkullu afirmó tener “la esperanza” de que se pueda alcanzar “un amplio consenso” en esta materia y apeló a “preservar el activo” que, a su entender, supone la “certidumbre fiscal”.

Asimismo, insistió en la necesidad de que la reforma fiscal sea “entendida como integral”, en relación a sus efectos globales en la economía. También apoyó el mensaje que defiende su consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, en relación a una subida de los sueldos de los trabajadores. “Y quizá tengamos que mirar todo esto también a la luz de lo que puedan ser los incrementos salariales, el poder de consumo, que reactiva la economía...”, señaló - DNA