GAsteiz - Los sindicatos ELA, LAB y ESK de la planta de Mercedes en Vitoria denunciaron ayer que en la fábrica vitoriana trabajan en la actualidad más de 500 operarios en situación de “fraude de Ley”.
Las tres centrales comparecieron en rueda de prensa en la capital alavesa para comunicar que, tras haber revisado “más de 4.000 contratos”, habían detectado más de medio millar de personas que siguen en la empresa, que tienen su contrato en fraude de Ley” porque, siendo eventuales, desempeñan tareas y ocupan puestos de trabajo “estructurales”.
A raíz del anuncio que hizo la empresa de que había hecho fijos a 600 eventuales, decisión forzada que los tres sindicatos atribuyen al requerimiento que la inspección de trabajo hizo a la multinacional tras una denuncia interpuesta por ELA, los denunciantes decidieron ponerse a revisar otros 4.000 contratos.
El resultado del análisis, según los sindicatos, arroja como resultado la presencia de personas que llevan “más de dos años trabajando ininterrumpidamente”, otros de forma “intermitente, pero aún así en fraude”, y otros que llevan más de ocho años “entrando y saliendo” de la empresa”.
Los sindicatos denuncian que, tanto la dirección de Mercedes como los sindicatos que firmaron el convenio, UGT, CCOO, Ekintza y PIM, trataron de “disfrazar el requerimiento de la inspección de trabajo anterior de logro conseguido en forma de firma de convenio”, y ahora han vuelto a intentar “tapar el fraude sistemático como un logro personal”, afirmó Igor Guevara, representante de ELA.
En su comparecencia, las tres centrales instan a la empresa a “regularizar esta situación, pues los contratos de estas personas finalizan en los próximos meses”. “Y entendemos que es justo que estas personas estén en primer lugar para ser indefinidas, pues ya lo deberían ser desde hace meses”, indicó Guevara.
Por su parte, el portavoz de LAB, Mikel Díaz de Alda, señaló en su intervención que el acuerdo entre las otras cuatro centrales y la empresa se produce “en el seno de la comisión de la que hemos sido excluidos ELA, LAB y ESK, y, a día de hoy, ni siquiera hemos recibido el acuerdo”.
“intereses particulares” En ese sentido, expresaron su “preocupación por si esta forma de actuar esconde intereses particulares ajenos a la situación del personal eventual”, dado que, a su juicio, desde “ciertos sindicatos se están pidiendo curriculums a sus afiliados y las circunstancias que han rodeado el acuerdo pueden esconderse favores mutuos”.
Díaz de Alda remarcó que resulta “muy significativo que quien reprocha falta de voluntad negociadora a estos sindicatos y quienes se han convertido en adalides de la libertad sindical, coincidan en excluirnos de la negociación de este acuerdo”.
Finalmente, el portavoz de ESK, Dani Ramos, señaló que los tres sindicatos están “dispuestos a negociar y establecer unas bases de contratación justos para todos” y, para ello, van a presentar al resto de las secciones sindicales y a la empresa un documento, que pueda servir como “punto de partida para de una forma definitiva, garantizar la transparencia y la igualdad de trato de todos a la hora de ser contratados o al transformar los contratos eventuales en indefinidos”. - Efe