vitoria - Los fabricantes siderúrgico vascos de tubos de acero sin soldadura, Tubacex y Tubos Reunidos, esperan con optimismo el presente 2017 pues han visto como se incrementa sustancialmente su cartera de pedidos en este inicio de curso tras cerrar un mal 2016, “uno de los peores años sino el peor de la historia del sector”, por la tremenda caída de la demanda en el área de oil&gas ante la paralización de buena parte de los proyectos energéticos en el mundo como consecuencia de los bajos precios del petróleo.

El resultado es que Tubos Reunidos triplicó sus pérdidas hasta alcanzar una cifra de 50,2 millones de euros de números rojos, todo ello de la mano de una reducción de las ventas en casi un 30% hasta situarse en 195 millones de euros.

Por su parte, Tubacex, aprovechó su posicionamiento en el mercado de tubos de acero inoxidable sin soldadura, de mayores precios que los de acero al carbono, para lograr cerrar el año con beneficios, casi medio millón de euros, pese a ver como los resultados se reducían un 94% con unas ventas de 494 millones de euros, un 7,4% inferiores.

Con todo, las compañías vascas productoras de tubos de acero confían en la recuperación de los precios del petróleo -en estos momentos estabilizados en el umbral de 55 dólares barril prácticamente el doble que el mínimo de hace un año- y en el aumento de la demanda en el importante mercado de Estados Unidos para contemplar un 2017 con una clara mejoría de los resultados.

En el caso de Tubos Reunidos, empresa que dirige el recién fichado Guillermo Ulacia, la compañía perdió 50,2 millones de euros, frente a los 16,1 millones del ejercicio precedente, en un desastroso 2017, año en el que las ventas se redujeron hasta los 195 millones de euros, un 30% menos. Para hacerse una idea de la profundidad de la crisis en 2008, Tubos Reunidos facturó 728 millones de euros.

El aumento de un 69% en la cartera de pedidos de este inicio de año hace que Tubos vea el año con optimismo sin tener que recurrir al ERTE del pasado año en sus plantas, si a ello se le suma la buena marcha del acuerdo con Marubeni se explica la confianza en el futuro.

Tubacex, la empresa dirigida por Jesús Esmorís, logró cerrar el año en positivo con 507.000 euros de beneficio, un 94% menos, pero beneficios. Fruto de unas ventas de 494 millones de euros, lo que supone un descenso del 7,4%. El Ebitda generado se redujo un 28,6% hasta los 35 millones de euros y aunque los datos no son malos, al ser un fabricante de productos premium, los inversores esperaban más de la empresa gestionada por Esmorís que sufrió ayer en Bolsa un fuerte varapalo al caer nada menos que casi un 6% en una Bolsa al alza.

Tubacex. Ganó 507.000 euros, un 94% menos. Las ventas, 494 millones, un 7,4% menos y el Ebitda ascendió a 34,9 millones, un 28,6% menos. La cotización en Bolsa bajó un 5,9% hasta 3 euros. Capitaliza 426 millones

Tubos Reunidos. Perdió 50,2 millones, el triple que los 16,1 de 2015. Las ventas fueron 194,9 millones, un 29,9% menos y el Ebitda de -15,5 millones. En Bolsa bajó un 1,5% hasta 0,9 euros y capitaliza 169 millones de euros