GASTEIZ. El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy las directrices económicas para la elaboración de los presupuestos generales de la comunidad autónoma del próximo ejercicio y que han sido explicadas por el consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu.
Azpiazu ha reconocido que el contexto mundial lleva a un escenario macroeconómico de "suavización del crecimiento de la economía vasca", que se quedará en el 2,3 % en 2017.
El Ejecutivo autonómico estima que el empleo crecerá este año el 1,8 % y el 1,7 % en 2017 y que la tasa de paro se va a ir reduciendo paulatinamente del 13,3 % en 2016 al 12,2 % en 2017 de media.
El crecimiento del 2,3 % para el próximo año se sustentará, según las previsiones del Gobierno vasco, en un crecimiento del 2,4 % de los servicios, frente a un 3,1 % de incremento de este sector en 2016.
El próximo año la actividad industrial crecerá el 2,3 %, cuando en 2016 se prevé que suba el 3,2 %, y la construcción mantendrá su tendencia positiva al incrementarse 1,6 %, después de que en 2016 vaya a hacerlo un 1,5 %.
En línea con la evolución global de la economía, el crecimiento del consumo de los hogares pasará del 3,1 % de subida tanto este año como en 2015 al 2,3 % en 2017, mientras que el gasto de las administraciones públicas solo crecerá el próximo ejercicio el 1,1 % (1,7 % en 2016).
El marco de estabilidad presupuestaria prevé un objetivo de déficit para el País Vasco del 0,6 % para el próximo año, del 0,3 % para 2018 y del 0 % para 2019, según lo acordado recientemente con el Gobierno español.
El consejero de Hacienda y Economía ha explicado que las actuaciones del presupuesto de 2017 deberán estar "alineadas con la doble prioridad del Gobierno de actuar como impulsor del crecimiento y de la creación de empleo, y como garante de la satisfacción de las necesidades básicas de las personas, como principio irrenunciable".
En materia de empleo, los presupuestos del próximo año prestarán una especial atención a las políticas públicas que favorezcan la integración en el mercado de trabajo de los jóvenes y de los colectivos más desfavorecidos, así como al fomento de medidas que faciliten la conciliación laboral y familiar.
Estas directrices no especifican si habrá subida salarial de los funcionarios, algo que se remite a los propios presupuestos del Gobierno Vasco, pero se garantiza el mantenimiento de los servicios públicos esenciales y no se prevé la creación de nuevos organismos autónomos, entes o sociedades públicas.
Los presupuestos de 2017 contemplarán el mantenimiento de las ayudas sociales, tanto en el ámbito del sistema de garantía de ingresos y para la inclusión social, como en el apoyo a las familias.
En este sentido, el Gobierno Vasco ha anunciado que desarrollará un "pacto de país por la infancia y la familia", porque, según Azpiazu, solo los países que han apostado firmemente por estas estrategias han sido capaces de hacer frente a las crisis de natalidad y corregir su pirámide de población".
El consejero ha expresado su impresión de que es conveniente "abrir una debate" sobre cómo garantizar las prestaciones sociales y ha reconocido que por el momento no está hecha una previsión sobre el impacto económico que tendrá la subida del Salario Mínimo Interprofesional en el pago de la Renta de Garantía de Ingresos.
