BILBAO - En medio del debate en torno a la pérdida de condiciones laborales de los trabajadores vascos por su adhesión a convenios estatales, dos grandes empresas han planteado a sus trabajadores abandonar su convenio colectivo actual y entrar en pactos de fuera de Euskadi. Se trata de Bridgestone, con fábricas en Basauri y Usansolo, y de EDP Naturgas, que tiene una de sus sedes principales en Bilbao. En ambos casos, los sindicatos denuncian del desplazamiento de la negociación colectiva hacia ámbitos con peores condiciones laborales.
En esa línea, los sindicatos del comité intercentros de Bridgestone mostraron ayer su rechazo a la pretensión de la dirección de acercar las condiciones laborales al convenio general de Químicas -el de aplicación en el Estado- y reclamaron un convenio de empresa con incremento salarial del 2%.
Tras cuatro años de congelación salarial, los trabajadores de Bridgestone creen que ha llegado el momento de mejorar los sueldos y recuerda que el número de trabajadores ha disminuido. Por ello, en un comunicado rechazaron los argumentos de la dirección sobre el aumento del gasto en personal y pidieron a la multinacional de neumáticos que “reflexione” y firme un convenio al alza.
En esa línea, destacaron el incremento de los beneficios de la compañía en los últimos años -los dividendos por acción han pasado de los 0,25 euros de 2012 a algo más de un euro en 2015- para reclamar la mejora de las condiciones laborales como se recoge en la plataforma sindical. Junto al incremento salarial, la plantilla pide aumentar en un 4% la aportación de la empresa al plan de pensiones.
naturgas Por su parte, el sindicato ELA denunció ayer la modificación unilateral de las condiciones laborales en la empresa de suministro de energía EDP Naturgas llevada a cabo a lo largo de los últimos años en aplicación de la reforma laboral del Gobierno de Rajoy.
ELA recordó que la negociación del convenio de esta empresa, participada por el Gobierno Vasco, arraigada en Euskadi aunque con presencia también en Asturias y Cantabria y con una plantilla de 370 trabajadores, se encuentra estancada desde hace dos años y medio. La central vasca explicó en su nota que, “años de reuniones y movilizaciones de los trabajadores no han servido para conseguir ningún acuerdo”.
“La empresa ha respondido con la aplicación sistemática de la reforma laboral; primero fue la perdida de la ultractividad del convenio, después la aplicación del artículo 41 del Estatuto de los Trabajadores sobre la modificación sustancial de las condiciones laborales, con la aplicación de los recortes que la dirección pretendía”, agregó ELA.
“No conformes con esta decisión -apunta la central nacionalista-, actualmente la estrategia de la dirección pasa por ofrecer descuelgues individuales, con lo cual pretenden que el trabajador actualmente en la plantilla de EDP Naturgas pase a otra empresa, HC (con sede en Asturias), con las condiciones que la empresa quiere”. - DNA
-3%
La confianza de los empresarios vascos respecto al periodo entre abril y junio que ahora comienza ha caído un 3 % respecto al trimestre anterior y se sitúa entre las más bajas de todas las comunidades autónomas.
Moderado repunte estatal. En cambio, la confianza empresarial en el conjunto de España ha subido un 0,6% de media para el segundo trimestre, con lo que retoma su tendencia alcista, informó el INE.