madrid - El Gobierno aprobó ayer la extensión hasta julio del próximo año del Plan PIVE 8, de incentivo a la compra de automóviles nuevos a cambio de achatarrar uno antiguo, con el fin de gastar los fondos remanentes que inicialmente finalizaban el próximo 31 de diciembre.

Asimismo, también se aprobó el Plan Movea, que busca impulsar la compra de vehículos impulsados con energías alternativas. Este programa contará con un presupuesto de 16,6 millones de euros durante 2016.

En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó que estas medidas permitirán reducir el impacto del transporte sobre el medio ambiente, así como disminuir la dependencia energética española al diversificar las fuentes de transporte y fomentar la renovación del parque.

Sáenz Santamaría indicó que el Gobierno ha puesto en marcha un Real Decreto para la concesión directa de ayudas a la compra de vehículos con energías alternativas y para la instalación de puntos de recarga para automóviles eléctricos en 2016, bajo la denominación Plan Movea, que unifica los anteriores Movele y Pima Aire.

Las ayudas se destinarán a la compra directa, así como a través de renting o leasing, de un vehículo nuevo o de seis meses antigüedad, en el caso de los eléctricos, que usen electricidad, gas (GNC, GNL o GLP) o pila de combustible de hidrógeno. También se podrán acoger motos y bicicletas eléctricas de pedaleo asistido. Igualmente se subvencionarán estaciones, cableados y dispositivos necesarios para la puesta en servicio de un sistema de recarga “rápido o semi-rápido” en zonas de acceso público. La cuantía de la ayuda variará en función del tipo de vehículo, del combustible, de la masa máxima autorizada o de la autonomía, con una horquilla de entre 200 euros (para bicicletas) y 20.000 euros (para autobuses).

La vicepresidenta señaló que el plan obligará al achatarramiento de furgones, camiones, autobuses o autocares anteriores a 2009, mientras que en el caso de los turismos y furgonetas se incentivará la baja con ayudas de 750 euros, aunque no será obligatoria. - E.P.