madrid - El consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, avanzó que la entidad cobrará una tasa fija de “en torno” a dos euros a los no clientes que retiren dinero en efectivo de los cajeros en dos meses o dos meses y medio, esto es a finales de septiembre o inicios de octubre.

Álvarez anunció esta modificación en la política de cajeros del Santander, que ahora cobra unos 0,60 euros de media a la entidad emisora de las tarjetas y que depende de la cantidad de dinero en efectivo retirado.

A partir del cuarto trimestre, el Santander cobrará directamente a los no clientes una tasa fija. La entidad cuenta con una red de unos 5.000 cajeros en España.

De esta forma, el banco presidido por Ana Botín se suma a Caixabank, que ya cobra dos euros a los no clientes por el uso de cajeros, y a BBVA, que cobrará la misma cantidad a partir de septiembre. Desde el sector se esperaba desde hacía tiempo que esta comisión se generalizara entre la mayoría de las entidades financieras que operan en España.

El número dos del Santander defendió que los cajeros requieren de una inversión y aseguró que es “caro” tanto la instalación y mantenimiento de estas máquinas. “Tiene sentido que los costes se trasladen a los no clientes”, explicó, para después calificar de “sana” esta nueva política de la entidad a partir del cuarto trimestre.

buenos datos Además, la entidad obtuvo un beneficio atribuido de 3.426 millones de euros en el primer semestre de 2015, lo que supone un aumento del 24% con respecto al mismo periodo de 2014, según informó ayer el banco.

Fuentes bancarias destacaron que ha logrado incrementar el beneficio en los diez principales mercados en los que opera, especialmente en sus tres grandes mercados: España, Reino Unido y Brasil. -E.P.