madrid - Las empresas y la banca confirman la recuperación de España, lo que ratifica también el Gobierno, que considera “moderada” su previsión de crecimiento para 2015 del 2%. Así lo aseguró ayer el ministro de Economía, Luis de Guindos, en su intervención en un foro organizado por Pimco y El Confidencial, en el que sostuvo que la economía española ha registrado “un cambio fundamental” en los últimos trimestres, que muestra “que estamos consolidando la salida de la recuperación”.
Para De Guindos, hay signos que confirman la recuperación, como la mejora del mercado laboral, de la competitividad, el incremento de la financiación o que el sector inmobiliario y de la construcción han dejado de ser elementos contractivos. Todo ello causa que los “los planetas se alineen”, dijo De Guindos. Pese a ello, advirtió de que aún hay riesgos que pueden afectar al crecimiento, entre ellos, los políticos, aunque afirmó que la sociedad española “es más madura de lo que parece” y que las encuestas muestran solo la desazón por la crisis. El ministro también se refirió a Europa y dijo que “las reformas estructurales son, sin duda, donde la región se ha quedado atrás y donde están las mayores dificultades, porque sin reformas la política económica y fiscal limita su transmisión”.
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, y el de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, coincidieron al asegurar que los riesgos que pueden afectar de forma negativa a la economía española están en Europa. Sevilla indicó que en la UE, vía consenso, hay que decidir hacía dónde se quiere avanzar. El consejero de CaixaBank aseguró que los riesgos para España no provienen tanto de su propia economía como de Europa y de su estancamiento, que incluso podría poner en peligro las previsiones de 2016.
En cuanto a la incertidumbre que pueden generar las próximas elecciones generales en España, Gortázar explicó que el Gobierno actual ha podido tomar medidas claras gracias a su mayoría, por lo que puede generar incertidumbre si “nos encontramos algo que no sea así”. En la jornada también participaron directivos de varias empresas españolas, y en concreto, las constructoras se mostraron confiadas en el denominado Plan Juncker para dinamizar el sector de las infraestructuras en Europa y contribuir así a la recuperación económica. Directivos de Ferrovial, OHL y Abertis subrayaron la necesidad de conocer más detalles de un programa de la Comisión Europea en el que confían, y con el que se destinarán 315.000 millones para proyectos de infraestructuras de transporte, energéticas y de investigación y desarrollo.
“El Plan Juncker es una apuesta”, defendió el consejero delegado de Ferrovial, Íñigo Meirás, porque en las economías europeas “la manera más rápida de atacar el desempleo es el sector de las infraestructuras” que, además, es un “dinamizador de primer orden” de la economía.
El consejero delegado de Abertis, Francisco Reynés, afirmó que el sector de las infraestructuras tiene “mucho futuro” gracias al Plan Juncker y la situación económica actual, porque “las concesiones son un negocio y seguirán siendo muy importantes para sacar” la economía “de donde está”. - Efe