BILBAO. El consejero vasco de Empleo y Políticas Sociales, Juan María Aburto, ha asegurado que ELA "ha decidido ser el problema" en el diálogo social en Euskadi porque, desde una posición crítica, LAB "es proclive a participar". Además, ha censurado que la central que lidera Adolfo Muñoz dirija contra él "improperios inaceptables, barbaridades", y afirme "cosas absolutamente falsas".

Por otra parte, se ha mostrado convencido de que la firma de alguno de los convenios del Metal ayudaría "mucho" a que, "a la vuelta de verano", se creara una mesa de diálogo social "más participativa".

En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, Aburto ha afirmado que la última vez que intercambió impresiones con ELA fue hace tres semanas, cuando se reunió con su secretario general, Adolfo Muñoz, quien se ratificó en la decisión de la central de no participar en una mesa de diálogo social".

A partir de entonces, según ha manifestado, sólo ha "escuchado" de ELA "improperios inaceptables", entre ellos, afirmar que Juan María Aburto se reúne con Confebask "a escondidas, para pactar los recortes, cosa que es una barbaridad y absolutamente falsa", ha dicho.

Para el consejero, ELA "ha decidido ser el problema" por lo que cree que, "mientras eso no cambie, tendrán que ser los afiliados los que decidan qué es lo que tienen que hacer".

Aburto ha asegurado que se ha reunido con los representantes de LAB, "y con ellos" proseguirán los contactos. En su opinión, aunque la postura de esta central es "crítica", sí es "proclive a participar con condiciones". "Su planteamiento es merecedor de ser tenido en cuenta. El Gobierno así lo va a hacer", ha dicho.

En este sentido, ha considerado "enormemente positivo" que "algunos de los convenios del Metal fueran firmados". "Están ahora mismo encima de la mesa planteamientos que merecen un estudio serio por parte de los sindicatos, pero también por parte de la patronal, y eso ayudaría mucho a que, a la vuelta del verano, la mesa del diálogo social pudiera ser más participativa", ha dicho.

PATRONAL

Preguntado por si Confebask es "el interlocutor adecuado", el consejero ha respondido que "es el interlocutor que tiene el Gobierno", si bien ha apuntado que "a nadie se nos ocultan las diferencias que existen entre las territoriales.

Ha recordado que "la propia gobernanza" de la Confederación Empresarial vasca "hace que las decisiones" deban ser tomadas "por unanimidad entre ellos", lo que "dificulta la adopción de acuerdo". A su juicio, existe, además, "un problema que se ha puesto encima de la mesa" tras la sentencia del convenio del textil de Bizkaia, que "pone en tela de juicio cuál es la representatividad de las patronales". "Esta va a ser una cuestión que va a dificultar más la negociación colectiva", ha dicho.

Aburto se ha referido así a la decisión del Juzgado de lo Social número 6 de Bizkaia, quien, a finales de abril pasado, anuló el convenio colectivo del Comercio Textil de Bizkaia firmado entre la patronal de nueva formación Bizkaidendak y ELA, por considerar que la representación empresarial carece de la legitimación legal necesaria.

DIALOGO

Aburto ha dicho seR consciente de que la mesa del diálogo social puede quedar 'coja' por la ausencia de ELA y los posibleS problemas que afecten a las patronales, pero ha añadido que, al margen de esta coyuntura, "los problemas de la precariedad laboral, del empleo juvenil y de la enorme tasa de desemplEo de las personas mayores de 45 años y del modelo de empresa, siguen estando ahí".

"Creo que, en un momento en el que empezamos a ver la salida de la crisis, es el momento más oportuno para ver qué se puede aportar desde el diálogo social", ha dicho. En este punto, ha emplazado a ELA a preguntarse "qué es lo que está portando a este país".

El consejero ha afirmado que el Gobierno vasco "apuesta por un diálogo social tripartito", y su papel, en ese ámbito, será el de "fomentar las relaciones laborales y la negociación colectiva".

Para Aburto, las diferencias entre los agentes sociales, en la actualidad, son de carácter "conceptual" porque, aunque existe una reforma laboral que "ha incidido directamente en las relaciones laborales", éstas ya eran "muy difíciles" ante de modificarse el mercado de trabajo.

El responsable vasco de Empleo ha apostado por "un nuevo modelo de relaciones laborales en el que, con la participación de los trabajadores. se establezcan modelos de participación de los beneficios y de participación en la flexibilidad necesaria". Además, cree que los País Nórdicos son un "modelo en el que mirarse" aunque ha reconocido que Euskadi "necesita su propio modelo" y "extrapolarlos, a veces de manera mimética, no es una buena idea".