BILBAO - Sumar para crecer. El Grupo Inser ha nacido en medio de la crisis y llega reforzado al momento de la salida con unas perspectivas inmejorables. El objetivo es facturar 40 millones de euros a medio plazo, en un horizonte de cinco años, lo que supondría multiplicar por ocho el nivel de ventas actual. La búsqueda de nuevos mercados es la palanca de ese ritmo de crecimiento junto con la reorganización comercial de tres compañías que hace un año no tenían ningún contacto y hoy comparte sinergias en el camino hacia final del túnel.
Detrás hay un grupo de inversores vascos, Duma Asociados, decididos a poner dinero en proyectos industriales con un luminoso futuro de rentabilidad, pero con un presente oscuro hasta hace un año. El director general del Grupo Inser, Borja Arrieta explica a DNA las claves de una historia que arranca en 2012 con la compra de la primera empresa en Bizkaia y que ha continuado con otras dos adquisiciones, una en Gipuzkoa y otra en Nafarroa.
Inser Robótica diseña en Urduliz grupos de autómatas a medida para fábricas que quieren optimizar sus procesos de almacenaje en palés. Roboconcept, con sede en Irun, ofrece soluciones a través de robots y de visión artificial para seleccionar por color, peso o medida cualquier alimento. Y Eina ha patentado una tecnología desarrollada en Uharte basada también en procesos automatizados para pulir piezas aviones, aerogeneradores, coches y otro tipo de industrias. ¿Qué tienen en común aparte de apoyarse en la robótica? Unos amplios horizontes de desarrollo fuera de Euskal Herria.
Las tres compañías han recibido una importante inyección económica que les ha permitido afrontar proyectos para los que no tenían músculo financiero. La alianza se asemeja a una fusión fría bancaria, no hay un registro de marca social, pero sí una marca de mercado. Al mismo tiempo se han engarzado estructuras para que las tres sean competitivas compartiendo gastos administrativos e incluso servicios para asistencia técnica.
En ese barco viajan 85 trabajadores repartidos en los tres centros productivos. Para completar la expansión por la geografía vasca de la iniciativa, la sede de Duma está en la localidad alavesa de Amurrio. Pero la locomotora no se para: el horizonte más inmediato del Grupo es una compra en Brasil para reforzar la presencia en todo Mercosur y continuar progresando una vez puesto en marcha el tren del crecimiento.
Tras año y medio de estudio de diferentes proyectos, la primera apuesta de inversión se consolidó en octubre de 2012 con Inser Robótica, en la que tenían participación Iberdrola y BBVA a través de la Corporación IBV, y Spri. Se buscaban empresas con recorrido, con "estructura para multiplicar" su ventas y que, si estaban en una situación delicada, fuera por un "enfoque erróneo" del negocio, no porque su sector sea complicado.
Inser Robótica respondía a ese perfil y se dio el paso de entrar en su capital. Aunque se detectaron grandes potencialidades, nada hacía pensar que se convertiría en un proyecto alrededor del cual iban a crecer otros para conformar un gran grupo. "El primer año fue muy complicado entramos en plena crisis de consumo y con mucha competencia en el rango en el que operábamos", asegura Arrieta. Era un problema que ya estaba detectado y que contaba con una solución: tomar un camino diferente y salir de la encrucijada en la que estaba atascada la rentabilidad de la compañía vizcaina.
"Habíamos identificado en una capacidad en Inser Robótica para competir en un nivel superior donde las empresas son más grandes, donde la capacidad de ser rentable es mayor y donde la competencia no es ya solo local, es o bien estatal o incluso, llegando muy arriba, es prácticamente solo internacional", explica Arrieta.
nueva compra en brasil Ese horizonte de madurez se alcanzará "con tiempo, no en uno o dos años", pero el umbral de rentabilidad se ha rebasado mucho antes. Los éxitos comerciales han empezado a llegar hace ocho meses y han entrado "de golpe" muchos pedidos. De este modo, el relanzamiento de la actividad de Inser Robótica va a ganar otra batalla este año, entrar en beneficios. "Estamos rodeados de empresas que están cerrando y nosotros vamos a ganar dinero, algo que no ha sido muy frecuente en esta compañía. Mientras otras sufren hasta el punto de desaparecer, estamos creciendo, adquiriendo otras compañías y además no paramos", añade el director general del grupo.
El repunte de la actividad ha permitido la contratación de seis personas en Inser Robótica y alcanzar una plantilla de 49 trabajadores, más de la mitad de la masa salarial de la alianza. También ha llevado a que tres empleados de la compañía de Urduliz se hayan desplazado este mes a Brasil en busca de nuevas opciones de negocio y de una compañía para comprar y seguir creciendo.
Esa nueva pieza del engranaje dará a Inser capacidad de distribución, de servicio técnico y presencia local en Mercosur, uno de los mercados más interesantes de la internacionalización. La compañía brasileña también será la referencia en esa zona del mundo de las dos hermanas. "Es la parte buena de las sinergias", subraya Arrieta.
Esas dinámicas posibilitaron el año pasado la compra de las otras dos compañías. Eina es fácilmente identificable con la alta tecnología, ya que es proveedor de maquinaria de Airbus y Gamesa y pronto lo será de Boeing. Roboconcept, por su parte, opera en el sector hortofrutícola y las industrias cárnica y pesquera. Se ha hecho un hueco gracias al desarrollo de soluciones basadas en la visión artificial, un campo que todavía no ha sido explotado con intensidad por el sector alimenticio.
En el computo general de las tres empresas, el 35% de la facturación se realizará en mercados exteriores este año, cuando hace dos años las ventas fuera rondaban el 2%. El salto ha sido enorme. Sin embargo, lo más importante es que en el periodo de maduración del proyecto el mercado español ha empezado a crecer, destaca el director general del Grupo Iner: "Tenemos muy claro que el mercado natural nuestro es el español porque presenta muchísimas oportunidades, sobre todo si subimos el rango competitivo".
El objetivo final es "multiplicar hacia otros lugares la capacidad de generar valor" de las tres piezas del grupo. En ese camino se llegará pronto a EEUU y posiblemente a Asia, pero el tronco central "continuará en Euskadi generando actividad y el cerebro siempre estará aquí".