Si el titular de economía español, Luis de Guindos, pensaba salir ayer airoso de la reunión de ministros de economía y finanzas de la zona euro erró el tiro por completo. El Eurogrupo, lo mismo que la Comisión Europea, entiende que el presupuesto de España para 2014 de Cristóbal Montoro corre el riesgo de violar el pacto de estabilidad y crecimiento y espera que el Ejecutivo español profundice y acelere las reformas estructurales dentro de la tramitación parlamentaria o "en paralelo". Entre las anunciadas ayer, de forma inesperada por el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijjselbloem, destaca una nueva vuelta de tuerca a la reforma del mercado laboral que De Guindos evitó anunciar pero se comprometió a realizar.
"En el caso de España se nos ha informado de que se están preparando medidas basadas en el programa nacional de reformas, incluida una segunda ronda de reformas en el mercado laboral", avanzó Dijjselbloem. "Estamos al tanto de que el gobierno español está contemplando esa reforma y estamos esperando que presente elementos adicionales y concretos en el presente periodo", añadió el vicepresidente y comisario de asuntos económicos, Olli Rehn. No hubo más detalles sobre cómo piensa tranquilizar España a la CE y curiosamente a Luis de Guindos se le olvidó mencionar este tema durante su breve intervención ante la prensa al término de la reunión. La explicación que posteriormente daban desde su ministerio es que la "segunda ronda de reformas" avanzada por el Eurogrupo se refiere a la ya prevista en el plan nacional de reformas, que incluye la simplificación de contratos y la ampliación del contrato indefinido de apoyo a emprendedores y a trabajadores a tiempo parcial, además de varios informes, uno del gobierno que ya está elaborado y otro pendiente de la OCDE.
Haya o no nuevos elementos en la ecuación lo cierto es que en Bruselas exigen al gobierno de Mariano Rajoy que profundice en las reformas para reducir un desvío estructural que, según la Comisión Europea, será el próximo año de medio punto del PIB y de un cuarto de punto las medidas estructurales fiscales necesarias lo que equivale a unos 2.500 millones de euros. "Necesitamos que las medidas planeadas o en preparación sean sustanciadas y presentadas de forma concreta lo antes posible para evaluar e informar al Eurogrupo", recordó Rehn. Concretamente, según la declaración suscrita por los 17 países de la Eurozona, los países que como España están en riesgo de incumplir las reglas "deben adoptar medidas apropiadas en el proceso presupuestario nacional o en paralelo para hacer frente a los riesgos identificados por la CE y garantizar que el presupuesto de 2014 cumple con el pacto de estabilidad y crecimiento", señala. Es decir, el Eurogrupo le pide de nuevo a España que profundice en las reformas para lograr el ajuste solicitado.
Satisfacción española Pese a los nuevos deberes, el ministro español salió de la reunión satisfecho. "Hemos recibido una respuesta positiva", llegó a asegurar. "Este ejercicio que hace la CE es positivo", añadió uno de los protagonistas de la reunión. Por tercera vez en menos de una semana volvió a insistir en que lo que separa a Bruselas de Madrid es una proyección de crecimiento, del 0,5% del PIB en el primer caso y del 0,7% en el segundo. Una diferencia de dos décimas que, según el ministro español es la que situaría la previsión de déficit público de la Comisión en el 5,9% frente al 5,8% que prevé España, justo el objetivo a cumplir el próximo año.
Una diferencia que ve mínima y que no exigirá ninguna modificación en el planteamiento de la política económica, ni en los Presupuestos de 2014. Guindos explicó que durante la ronda de explicaciones que le exigieron sus colegas ratificó el compromiso de España de cerrar 2014 con un déficit del 5,8% y que tienen margen de maniobra en el plan nacional de reformas para limar las diferencias que separan a Bruselas de Madrid. "Existen medidas que están en el plan nacional de reformas español que todavía están pendientes de implementar y que lógicamente tienen que ser consideradas a la hora determinar cual es el efecto presupuestario", valoró citando únicamente la reforma de las administraciones públicas e insistiendo en que la reforma fiscal es para aplicar en 2015.