Vitoria. El que fuera administrador único de la empresa automovilística Epsilon Euskadi, Joan Villadelprat, achacó ayer su quiebra en 2011 a la crisis económica, a la falta de inversores privados y al cambio de siglas en el Gobierno Vasco, ya que el PSE dejó de verlo, dijo, como un "proyecto de país". Villadelprat compareció ayer en la vista celebrada en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Vitoria, que tendrá que determinar si la declaración de quiebra de esta compañía puede calificarse de "culpable" tal y como defienden la Administración Concursal, la Fiscalía y la Abogacía del Estado, y como pidió también el anterior Gobierno Vasco del socialista de Patxi López.
El proyecto Epsilon Euskadi, creado para impulsar un proyecto de automovilismo de competición, recibió unos 50 millones de euros en ayudas públicas que provinieron de diversas instituciones incluido el Gobierno Vasco, pero en febrero de 2011 solicitó el preconcurso y en julio de ese año la declaración de concurso de acreedores al no poder afrontar los créditos contraídos con Caja Vital y Kutxa. De esa deuda, que tras una rebaja acordada con Kutxabank asciende a 16,3 millones de euros, se ha tenido que hacer cargo el Parque Tecnológico de Álava, del que son socios el Gobierno Vasco -a través de la Spri- la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria.
El abogado de la Administración Concursal mantuvo ayer que la solicitud del concurso fue "tardía" porque ya en 2009 la compañía declaró pérdidas por 1,3 millones de euros. Asimismo, censuró que Villadelprat "agravó" el estado de insolvencia por la venta en abril de 2011 de la rama de competición automovilística, que suponía "más del 80% de sus ingresos vía esponsorización", lo que generó una desvalorización de la mercantil de 899.263 euros. Esta venta está siendo investigada por la vía penal en otro juzgado de Vitoria, ya que según la Fiscalía se llevó a cabo por un precio "notoriamente inferior al valor real" y podría incurrir en un delito de alzamiento de bienes.