Bilbao. La última reforma de las pensiones que propone el factor de sostenibilidad, entre otras medidas tiene el rechazo de miles de vascos. Las manifestaciones convocadas ayer por varios sindicatos en las cuatro capitales de la CAV y Nafarroa así lo demuestran. Fueron miles las personas que tomaron las calles de las capitales en protesta por la reforma, reclamando además un modelo propio.
Bajo el lema "Pentsioen murrizketarik ez. Por un modelo propio en Euskal Herria", los manifestantes partieron en Bilbao de la Gran Vía para finalizar ante el Teatro Arriaga convocados por los sindicatos ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, EHNE, HIRU, CNT y CGT y diversas organizaciones sociales. En esa marcha bilbaina estuvo el secretario general de ELA, Adolfo Txiki Muñoz, quién aseguró ante los medios que esa reforma del sistema de pensiones que propone el Gobierno popular "es un regalo para la banca" porque busca "forzar a la gente a contratar seguros privados". A su juicio el Ejecutivo español plantea "vaciar los bolsillos de los pensionistas y los trabajadores, en beneficio de la banca y las compañías de seguros" y denunció que por tanto vayan a "quitar dinero de las pensiones para pagar la especulación y las deudas de los bancos".
La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, por su parte, acudió a la protesta de Donostia que partió del Boulevard, y desde dónde reivindicó que un sistema público es perfectamente "viable". Como Muñoz, minutos antes de que arrancara la protesta, Etxaide manifestó que detrás de la última reforma de Rajoy está el objetivo de beneficiar los "planes privados de pensiones" de las entidades financieras.
Ambos líderes sindicales reclamaron además un sistema de pensiones vasco. En ese sentido, Etxaide hizo un llamamiento a las instituciones vascas para que "avancen" hacia un sistema público de pensiones "propio", que sea "viable y garantice" unas prestaciones "dignas". Muñoz reclamó que en Euskadi "se tomen decisiones que preserven lo social" y "que existen alternativas a las medidas impuestas por Madrid y respaldadas por las administraciones vascas". La secretaria general de LAB pidió a la administración vasca que "no se excuse" bajo el argumento de que "esto lo decide Madrid", ya que "aquí hay mucho que hacer" como la aprobación de medidas para "complementar" económicamente las pensiones de un colectivo que se verá "empobrecido".
El líder de ELA pidió a los políticos "que se bajen de la limusina y atiendan las reclamaciones sociales", exigiendo a los partidos vascos "que despierten" de su actitud "pasiva" frente a la reforma. >Dna