bilbao. Tras anunciar que las pensiones subirán solo un 0,25% el año que viene, el Gobierno español busca apoyos políticos y sociales que le acompañen en el ajuste. La ministra de Empleo, Fátima Báñez, presentó ayer en el Congreso la reforma de pensiones dando multitud de datos negativos sobre la situación de las arcas de la Seguridad Social a fin de justificar el recorte. Dentro de este dibujo negro, Báñez avanzó que el Ejecutivo sacará otros 6.000 millones de euros del Fondo de Reserva de aquí a final de año. De esta manera, el Gobierno de Rajoy habrá consumido en dos años más de 23.000 millones, sumando el fondo con los excedentes de las mutuas, más del 30% de la grasa de la Seguridad Social.

El PP recurrió por primera vez al Fondo de Reserva en el último tramo de 2012, cuando sacó algo más de 7.000 millones de euros, a los que se han sumado otros 5.500 millones este año. Además, en esta parte final de 2013 se gastarán otros 6.148 millones para hacer frente al pago "puntual" de prestaciones, lo que dejará en la hucha poco más de 53.000.

Por tanto, el PP ha consumido 18.600 millones en dos años, a lo que hay que sumar prácticamente la totalidad del segundo fondo, el que guardaba los excedentes de las mutuas, dotado con 4.500 millones. Así, el total de dinero utilizado supera los 23.000 millones, algo más del 30% de los recursos extra con que contaba el sistema al principio de la crisis.

Báñez avanzó que la deuda de la Seguridad Social llegará a 36.500 millones en 2016. El Ejecutivo centra el debate sobre el futuro del sistema en el envejecimiento de la población, pero la otra parte de la ecuación es la merma constante de los ingresos porque cada vez hay menos ocupados y los que trabajan cobran cada vez menos, algo a lo que están contribuyendo las medidas del PP.

Ante las críticas en el Congreso, el Gobierno se ha mostrado dispuesto a subir las pensiones en 2014 por encima del 0,25% si partidos y sindicatos aceptan las bases de la reforma de pensiones a fin de ahorrarse la presión social con la que ya amagan las centrales sindicales.

"Estamos dispuestos a cambiar la cifra -el 0,25%- según acabe el proyecto de ley"

fátima báñez

Ministra de Empleo