Vitoria. Con una patata caliente que no cesa de crecer en Álava (Laminaciones Arregui, Beretta Benelli, Alumafel, Pemco, Holtza...), la Diputación parece no tener otra alternativa que diseñar políticas e instrumentos financieros para enderezar un rumbo insostenible. Cuatro años de crisis han terminado por dilapidar la tesorería foral y situar la cifra del desempleo local hasta alcanzar los casi 25.000 parados, una cifra inédita en las estadísticas oficiales de las últimas décadas. Por este motivo, sobre todo con el espíritu de incentivar el desarrollo económico, que es el único motor capaz de revertir la situación, la Diputación aprobó ayer un programa para avalar la financiación de proyectos de pequeñas y medianas empresas y autónomos, con un saldo máximo vivo de seis millones de euros. La medida recibió el visto bueno del Consejo de Diputados celebrado ayer y pretende dar respuesta a los problemas de financiación que padecen numerosas empresas del territorio histórico.

El Gobierno foral recordó en este sentido que "la gran mayoría" de las empresas alavesas -pymes y autónomos en particular- están atravesando "un momento muy difícil" como consecuencia de la crisis económica.

Apuesta por la I+D+i En este sentido, la Diputación ampliará los destinatarios, contenidos y condicionantes del acuerdo sellado en Consejo de Diputados el 27 de julio, y que aprobó las bases reguladoras del programa para facilitar la financiación de proyectos innovadores en las pymes, y proceder a elaborar nuevos convenios de colaboración con las Sociedades de Garantía Recíproca Elkargi y Oinarri, con los nuevos requerimientos que se desarrollen reglamentariamente.

Este programa, explicaron sus responsables, pretende avalar la financiación de las pymes que tienen un marcado carácter innovador y que impliquen aspectos como la mejora de la gestión, la mejora de la comercialización de productos o servicios o el desarrollo de nuevos productos. Según el diputado general, este tipo de compañías "necesitan reestructurar sus pasivos para propiciar una consolidación financiera que les permita digerir los endeudamientos que puedan presentar en unos plazos que vayan acordes con el proceso de recuperación económica". Además, añadió, necesitan "financiación para la inversión en unas condiciones adecuadas". Por otro lado, el responsable foral también destacó que las empresas suministradoras "necesitan financiar los pedidos, toda vez que hacen falta recursos de capital para acompañar en los procesos de inversión y de expansión, así como para emprender nuevos proyectos y empresas. Asimismo, la Diputación ha explicado que las empresas requieren de "herramientas para adecuarse a la realidad, que pasa, irremediablemente, por la innovación permanente, la internacionalización y la cooperación".