Madrid. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), la francesa Christine Lagarde, afirmó ayer que hay "menos de tres meses" para salvar al euro e indicó que son necesarias acciones en este sentido dentro de este marco temporal. Con España como cuarto país rescatado, Chipre a las puertas e Italia amenazada con un contagio que dejaría a la Eurozona sin capacidad de respuesta, el Fondo Monetario Internacional lo tiene claro: las decisiones políticas para salvaguardar la moneda única deben llegar y con celeridad.
En una entrevista exclusiva concedida a la cadena de televisión estadounidense CNN, Lagarde dio respuesta a la fecha límite vaticinada por el multimillonario inversor estadounidense de origen húngaro George Soros, quien afirmó que Europa tiene tres meses para salvar la moneda única. "La construcción de la eurozona ha llevado tiempo y es un trabajo en construcción en este momento", explicaba Lagarde que, no obstante, declinó posicionarse sobre una de las principales amenazas a las que se enfrenta el euro: la posible salida de Grecia del régimen común. La directora gerente del FMI se limitó a decir que lo que pase con Atenas "va a ser una cuestión de determinación política".
reclamación En la misma línea de urgencia el vicepresidente económico de la Comisión, Olli Rehn, pidió ayer al Parlamento Europeo que apruebe su versión de las dos propuestas comunitarias que permiten la supervisión de los proyectos presupuestarios y el refuerzo de las cuentas de países con graves dificultades. El pleno de la Eurocámara vota hoy en Estrasburgo (Francia) ambas propuestas.
En la primera, para países bajo rescate y otros con problemas serios, se establecen supervisiones estrechas de la Comisión prorrogables cada seis meses, visitas periódicas al país e informes trimestrales sobre la situación del Estado. Si se concluye que se requieren nuevas medidas y que la situación financiera de un país amenaza la estabilidad de la eurozona, el Consejo por mayoría cualificada y a propuesta de la Comisión podrá recomendar un plan de ajuste.
En la segunda propuesta, los países del euro deben entregar cada año hasta el 15 de octubre su proyecto presupuestario. Este proyecto y los planes nacionales a medio plazo deben basarse en previsiones macroeconómicas independientes. Tendrán que crear organismos independientes que supervisen el cumplimiento de las reglas presupuestarias relativas al equilibrio. La Comisión Europea emitirá un dictamen antes de cada 30 de noviembre sobre cada presupuesto y si constata un incumplimiento especialmente grave de las obligaciones establecidas en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento pedirá al país que revise las cuentas. >dna/efe/e.p.