vitoria. Los consejos rectores de Caja Laboral y de Ipar Kutxa haprobaron ayer el proyecto de fusión de ambas cooperativas de crédito, que deberá ser refrendado por las asambleas generales de las dos cajas el próximo 30 de junio. La cooperativa resultante gestionará más de 25.000 millones de euros en activos, con más de 1,3 millones de clientes en 450 oficinas; contará con una plantilla de más de 2.500 empleados y unos recursos propios de 1.700 millones. La nueva caja tendrá su sede social en Arrasate -donde está localizada Caja Laboral- y su consejo rector contará transitoriamente con quince miembros, doce de ellos de la entidad guipuzcoana y tres de Ipar Kutxa, según consta en el protocolo de integración. El calendario establecido para el proceso de integración, que previsiblemente culminará el próximo mes de noviembre, se está cumpliendo según lo previsto. El objetivo pretende un proyecto con altos índices de solvencia y eficiencia y vocación de "seguir siendo un motor para la economía del país".