Vitoria. La situación empresarial hace mucho tiempo que es mala, pero, como dice la Ley de Murphy, todavía es susceptible de empeorar. Y en el fondo, ése es el mensaje que ayer trasladó la patronal alavesa en una jornada en Vitoria ante el Gobierno Vasco, las entidades financieras -representadas por Kutxabank- y Elkargi, la Sociedad de Garantía Recíproca. Todas ellas reunieron a más de 150 empresarios en torno a una preocupación de máxima actualidad como la necesidad de financiación en el empresariado vasco. "Si no vuelve a fluir el crédito o este tiene precios inalcanzables, el escenario para nuestras empresas va a empeorar y mucho", avisó el presidente de SEA, Pascal Gómez, que cuantificó ese "mucho" en nuevos cierres, más expedientes de regulación, más concursos de acreedores, un aumento de la morosidad "imparable" y mayores tasas de desempleo -Álava cuenta en estos momentos con 25.074 parados-. Ante semejante escenario, la patronal exigió una reactivación inmediata del crédito para que las empresas puedan "sobrevivir" y refinanciar cuentas suscritas en el pasado además de poder invertir en el negocio para mantener su actividad industrial. No es de recibo, denunció Gómez, que haya proyectos empresariales que no están pudiendo atender a clientes por falta de financiación. "Este es un lujo que no nos podemos permitir si queremos dar portazo a la crisis", añadió.

Sin noticias del gobierno En este angustioso contexto se encuentran en estos momentos casi seis de cada diez empresas, que reconocen tener mucha o alguna dificultad para acceder a la financiación. De estas, prácticamente en su totalidad se corresponden al sector del metal, mientras que el porcentaje se dispara al 75% en firmas del sector maderero o de la construcción.

Por todo ello, SEA lanzó un llamamiento al sistema financiero y al propio Gobierno Vasco -que el pasado 7 de marzo anunció un plan para poner en circulación 2.180 millones de euros este año de los que aún las empresas no han visto ni un euro, como advirtió el pasado lunes el secretario general de la patronal, Juan Ugarte- para que reinviertan de verdad en las empresas el dinero público que han recibido. "Hasta la fecha no hemos participado aún del anunciado brote crediticio", ironizó Gómez.

palo de Fernández a merkel A continuación tomó la palabra el presidente de Kutxabank, Mario Fernández, quien repasó la actualidad económica vasca y analizó el "inquietante" futuro de Europa, al que auguró malos tiempos si continúa aplicando las políticas que dicta Alemania, muy poco expansivas. "Salir de la crisis fomentando únicamente recortes es objetivamente injusto y erróneo", criticó.

Apeló después Fernández a realizar un "esfuerzo" a todos aquellos que tiene un trabajo aceptando una moderación salarial, e insistió en la necesidad de aunar esfuerzos y fomentar las fusiones empresariales para ganar músculo, Kutxabank incluida. "Debemos reflexionar sobre la participación en operaciones para adquirir una mayor dimensión, puesto que, de lo contrario, el próximo año podríamos quedar a la cola del sector en cuanto a volumen de activos u otros indicadores", avanzó.

Por su parte, el consejero de Economía, Carlos Aguirre, volvió a demandar un debate profundo en Euskadi para revisar el modelo social que desea en el futuro y que pasa "inevitablemente" por un reajuste de su política fiscal.