Vitoria, 15 nov (EFE).- Los presupuestos que ha diseñado el equipo de gobierno de la Diputación de Álava (PP) para 2012 experimentan un desplome del 16,6 por ciento en relación a las cuentas de este año, aunque el gasto social aumenta un 2,8 por ciento.
El diputado foral de Hacienda, José Zurita, ha entregado hoy el proyecto de presupuestos al presidente de las Juntas Generales de Álava, Juan Antonio Zárate, y posteriormente ha detallado en rueda de prensa las principales partidas recogidas en el texto.
El presupuesto propio de la Diputación ascenderá en 2012, según el proyecto, a 437,1 millones de euros, frente a los 524,4 millones del presente ejercicio.
En este importe está incluida la emisión de deuda prevista por la institución foral, que se eleva hasta los 117,5 millones de euros, 63,5 millones de ellos de endeudamiento propio y otros 54 millones correspondientes a la cantidad que la Diputación tiene que devolver al Gobierno Vasco en concepto de las ayudas de las denominadas vacaciones fiscales que recuperó el anterior equipo de Gobierno foral presidido por Xabier Agirre (PNV).
Según la actual Diputación, el PNV recaudó 80 millones de euros de dichas ayudas que en su día se concedieron a empresas y que fueron declaradas posteriormente ilegales por Europa, pero ese dinero se gastó en los diferentes presupuestos por el anterior equipo nacionalista.
Ahora, la Diputación tiene que hacer frente a la devolución al Gobierno Vasco del 70 por ciento de los 80 millones, es decir, 54 millones, tal como establece la Ley de Aportaciones, aunque ambas administraciones están negociando el posible fraccionamiento de este importe.
Por ello, aunque la Diputación ha consignado esos 54 millones en los presupuestos, es posible que en 2012 no haya que recurrir finalmente a una deuda por esa cantidad total ya que, según ha explicado Zurita, podría alcanzarse un acuerdo con el Gobierno Vasco para devolver en 2012 una parte (se barajan 18 millones).
Si se descuenta la emisión de deuda prevista, el presupuesto de la Diputación para el próximo año sería de 319 millones de euros, un 30,6 por ciento inferior al de 2011.
Zurita ha justificado esta caída de las cuentas públicas por la recaudción por ingresos prevista, que asciende a los 1.909 millones de euros, una cantidad que se sitúa en los niveles del año 2006.
El diputado ha destacado que, pese a esta reducción presupuestaria, se incrementa un 2,8 por ciento el gasto social y el Departamento de Servicios Sociales absorbe el 34,83 por ciento del presupuesto.
Por contra descienden un 11 por ciento las inversiones aunque el diputado de Hacienda no ha aclarado, a preguntas de los periodistas, los proyectos que se verán afectados por esta caída.
El proyecto también prevé la congelación de los gastos de personal y un descenso del 30 por ciento en transferencias y subvenciones corrientes.
Zurita ha asegurado que es el "mejor presupuesto" para hacer frente al "peor contexto" económico y financiero y ha subrayado la apuesta que se hace por el gasto social para que "ningún alavés quede desprotegido en época de dificultades".
A partir de ahora el proyecto presupuestario entra en el trámite de enmiendas en las Juntas Generales, que son las que tendrán que aprobar el texto en un pleno convocado para el 22 de diciembre.
El PP necesitará apoyos para sacar las cuentas adelante ya que solo tiene 16 de los 51 procuradores en las Juntas Generales.
Zurita ha confiado en lograr el mayor apoyo posible y ha pedido al resto de los grupos "responsabilidad y cintura".
Preguntado por si se prevén reformas tributarias el próximo año, el diputado ha manifestado que es un tema que se está abordando con las otras dos diputaciones con el fin de alcanzar un pacto armonizado, aunque ha dejado claro que Álava está "muy lejos" de las modificaciones que plantea Gipuzkoa, en manos de Bildu. EFE
