atenas. El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, sucumbió anoche a las intensas presiones dentro de su partido, el PASOK socialista, y desde la oposición conservadora de Nueva Democracia para la formación a partir de hoy sábado de un gobierno de unidad nacional que gestione la crisis política y económica, consiga la aprobación parlamentaria del segundo rescate de la UE a Grecia, tranquilice a los dirigentes europeos, especialmente Sarkozy y Merkel y evite tensiones al euro.
Papandreu cerró anoche, según varios medios de comunicación, un pacto con la oposición (partidaria de elecciones anticipadas) por el que presenta la dimisión y su ministro de Economía, Evangelos Venizelos, formaría un Gobierno de coalición que se responsabilizará de conseguir la aprobación del plan de rescate. Venizelos, según algunos medios, logró el respaldo de los líderes de algunos partidos menores, lo que permitiría ganar apoyos y aplazar hasta dentro de unos meses la convocatoria de elecciones anticipadas. Sin embargo, en esta coalición no estaría la principal formación opositora, Nueva Democracia. Durante su discurso de anoche ante el Parlamento griego Papandreu apeló a la unidad, reconoció los "trágicos errores" cometidos hasta llegar a la situación actual y proclamó la aprobación del segundo rescate como la "prioridad nacional". El primer ministro hizo un llamamiento a un gobierno de coalición -manifestó su "intención de negociar con los partidos para negociar y acordar el nuevo gobierno"- y reclamó un consenso "mayor" para dar vía libre al rescate. En este sentido, defendió su órdago de esta semana, cuando anunció que sometería la aprobación del rescate europeo a un referéndum.
"El acuerdo necesita un apoyo más amplio y honesto esto es por lo que convoqué el referéndum". "Estoy seguro de que iba a ser sí, porque es en interés del pueblo griego", dijo el primer ministro, al tiempo que llamó criticó la "hipocresía" de la oposición. "¿De qué tienen miedo? Nos acusaron de que escuchásemos de los pobres y tomásemos esta decisión democrática". El acuerdo, añadió permite a Grecia eliminar "gran parte" de sus préstamos y contempla el pago de intereses "muy bajos". "Nos hace el camino más fácil para los próximos años", señaló.
Por otro lado, durante su discurso descartó la convocatoria de elecciones anticipadas porque tendría consecuencias "catastróficas". Con los comicios descartados, pidió el respaldo para abrir conversaciones inmediatas con otras formaciones para la formación de un gobierno de concentración nacional. Antes de celebrar elecciones, Grecia necesita lo que el primer ministro calificó como una "gobierno fuerte". Una vez que la situación se haya estabilizado, entonces se pueden convocar los comicios, agregó. "No me importa si soy elegido. Ha llegado el momento para un nuevo esfuerzo, con buena voluntad", manifestó Papandreu, que durante su discurso pasó revista a su carrera política de 30 años. Grecia necesita resolver la actual crisis política para poder seguir recibiendo la ayuda internacional y permanecer en la zona euro.