Vitoria. La sección sindical de UGT en Michelin advirtió ayer del peligro que corre la negociación del convenio colectivo que desde hace meses se está negociando si la compañía no abandona su forma desconocida de encarar las reuniones, basada de un tiempo a esta parte en la "verticalidad" y la "desconfianza" hacia la parte sindical, dos ingredientes muy poco recomendables para reestablecer el diálogo y la negociación. El mensaje, extendido ya entre buena parte de los afiliados a UGT, forma parte de una carta redactada por Alberto Alonso, responsable de la sección sindical de esta central en Michelin, y que este periódico publica hoy en sus páginas de opinión.

Según el escrito, de dos folios de extensión, el clima de tensión que viene protagonizando los últimos encuentros comenzó cuando Michelin, a partir del segundo trimestre, rompió de forma unilateral la dinámica negociadora "poniendo sobre la mesa una oferta claramente asimétrica donde las garantías de beneficios futuros para la empresa pasarían por la merma de los beneficios actuales, y futuros, de los trabajadores", reconoce Alberto Alonso.

El colofón a esta situación de incertidumbre ha sido la presentación de un ERE en la factoría de Aranda de Duero para 1.200 trabajadores durante 15 días, donde las "formas" han pasado a ser parte del problema a tratar. La empresa no acepta más respuesta que "el sí por el sí", sostiene la carta, sin opción a entrar a negociar las posibles consecuencias de dicha medida.