madrid. El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos anunció ayer que mantendrá los tipos de interés en un rango objetivo de entre el 0% y el 0,25%, "al menos hasta mediados de 2013". En un comunicado, la institución estimó que la situación económica justifica que permanezcan en niveles "excepcionalmente bajos" hasta esa fecha, donde permanecen sin cambios desde diciembre de 2008. La novedad es precisamente que pongan fecha a esa rebaja.

La medida anunciada llega tras la jornada del lunes, en la que Wall Street sufrió grandes caídas tras la rebaja del rating de EEUU por parte de S&P's. Además, según una encuesta publicada ayer, el 77% de los estadounidenses cree que la situación económica de su país está empeorando, lo que sitúa la confianza en su economía en la más baja desde la Gran Recesión.

La institución, que busca promover la recuperación económica y ayudar a garantizar que la inflación se mantenga en niveles coherentes, discutió ayer las herramientas disponibles para promover una fuerte recuperación económica y aseguró que está preparada para aplicarlas de forma apropiada, aunque no concretó ninguna medida, como por ejemplo, un nuevo programa de recompra de bonos.

La FED reconoció que el crecimiento económico en lo que va de año ha sido "considerablemente más lento" de lo que esperaba y prevé un ritmo de recuperación también más lento de lo previsto para los próximos trimestres. Respecto al mercado laboral, la institución presidida por Ben Bernanke señaló que su situación se ha deteriorado en general en los últimos meses.

Mientras, en Europa ya empiezan a sonar voces que piden que el BCE abarate los tipos, toda vez que la semana pasada Jean-Claude Trichet anunciara que se mantienen en el 1,5%. Un precio muy distanciado del 0,25% de EEUU sin ir más lejos, el gurú que anticipó la crisis, Nouriel Roubini, afirmó el lunes que el BCE tiene que bajar los tipos hasta el 0%. Pero el presidente del BCE ayer no explicó nada al respecto y se limitó a pedir nuevos ajustes en la zona euro. Trichet reclamó a España e Italia que aceleren su vuelta a situaciones presupuestarias "normales".

Mercados Y mientras los mercados amanecieron con una jornada más tranquila que la del lunes. La Bolsa española logró minimizar la caída registrada durante gran parte del día gracias a la recuperación de Wall Street en su apertura, tras el "lunes negro" vivido la víspera. El Ibex 35 acabó la jornada con pérdidas del 0,36% y se situó en los 8.428,90 puntos, un nuevo mínimo anual, nivel al que no llegaba desde abril de 2009. Se trata del octavo día consecutivo del Ibex en negativo y las pérdidas en lo que va de año ascienden al 14,51%. Por su parte, la prima de riesgo española continuó ayer la tendencia a la baja iniciada el lunes ante la intención del Banco Central Europeo de hacerse con deuda española e italiana.

La prima española bajó hasta los 271,7 puntos básicos, con la rentabilidad del bono español a 10 años en el 5,081%, su mínimo desde el mes de diciembre. La actuación del BCE también favoreció a la prima de riesgo transalpina que se relajó hasta 279,7 puntos básicos, después de que el rendimiento de su deuda a 10 años descendiera hasta el 5,162%, su nivel más bajo desde principios de julio. Y es que el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, confirmó ayer que el organismo ha participado en el mercado secundario de deuda y planea seguir con esa práctica aunque se trate de una medida "no convencional". "Estamos actuando en el mercado secundario. Pero no diré qué estamos comprando", dijo el presidente del BCE.

Según el periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung tras consultar a varios expertos de la banca alemana, el supervisor habría adquirido el lunes hasta 1.500 millones de euros en deuda pública española. De acuerdo con los cálculos de las principales instituciones financieras, el BCE adquirió bonos soberanos de Italia y España por un valor medio estimado de 4.000 millones de euros, invirtiendo así más en Italia.