WASHINGTON. El plan impulsado por el presidente de la Cámara, John Boehner, debe contar con al menos 217 votos a favor de los 435 totales, y condiciona el alza del límite de endeudamiento a un recorte de gastos de cerca de un billón de dólares en la próxima década.

Pese a contar con mayoría republicana en la Cámara de Representantes, la propuesta de Boehner parece no haber logrado el respaldo de los 240 republicanos, especialmente de los representantes del ala conservadora, el Tea Party, que lo consideraban demasiado suave.

Fuentes republicanas informaron de que el plan había sido retrasado, y que se tenía previsto que fuese sometido a votación esta noche, aunque este nuevo plazo no ha sido confirmado.

Boehner reconocía esta mañana que aún no había logrado el número de votos necesario para aprobar la medida, pero afirmó que estaban "moviéndose en la dirección correcta".

Asimismo, indicó que su plan, que permitiría la subida del tope de endeudamiento actual de 14,3 billones, no era "perfecto", pero que era "factible y firmable" por el presidente de EEUU, Barack Obama.

No obstante, antes de llegar a la mesa de Obama, en el caso de que la Cámara de Representantes apruebe el plan republicano, éste debería pasar por el Senado, donde la mayoría demócrata ha asegurado que lo rechazría.

La división del Congreso de EEUU ha desembocado en un peligroso bloqueo político en Washington que amenaza con causar la suspensión de pagos del país, la primera en su historia reciente, y podría ocasionar "catastróicas" consecuencias económicas, en palabras de Obama.