madrid. Philip Morris ha seguido los pasos de Altadis para tratar de zanjar la guerra comercial que libran las grandes tabaqueras en el mercado español y ha decidido incrementar entre 15 y 25 céntimos los precios de sus principales marcas de cigarrillos, entre las que se encuentran las cajetillas de Marlboro, Chesterfield y L&M.

La multinacional comunicó ayer al Comisionado para el Mercado de Tabacos el cambio de tarifas, que entrará en vigor previsiblemente hoy con su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), según informaron fuentes del sector.

En concreto, Marlboro se encarece 15 céntimos, al pasar de 3,85 a cuatro euros, mientras que Chesterfield sube su precio 25 céntimos, de 3,50 a 3,75 euros. Por su parte, L&M cuesta 3,50 euros, frente a los 3,30 euros. Philip Morris sube también 20 céntimos las versiones baratas de estas marcas, como Marlboro Pocket y Touch, hasta 3,85 euros, y Chesterfield Naked y Soft, hasta 3,70 euros. L&M Soft, por su parte, subirá 10 céntimos, hasta 3,40 euros.

Desde Philip Morris señalaron que el cambio de precios tiene "carácter exclusivamente competitivo y sigue la tendencia de los últimos movimientos realizados en el mercado". "Con estas subidas pretendemos ajustarnos a la nueva realidad de mercado que se está configurando", apuntó el director de Asuntos Corporativos de Philip Morris España, Hernán Irigoyen.

Sin embargo, según fuentes del mercado, la subida de este grupo es inferior a la esperada, especialmente en el caso de Marlboro, que se mantiene 25 céntimos por debajo del precio que tenía a mediados de mayo (4,25 euros), antes del inicio de la guerra de precios a la baja.

La subida de Philip Morris es inferior a la aplicada por Altadis el 2 de julio, cuando encareció entre 20 y 30 céntimos los precios de sus principales marcas, como Fortuna, Nobel y Ducados, que recuperaron las tarifas anteriores a la batalla comercial.