PAMPLONA. Los tres presidentes han tomado la decisión de iniciar este proceso de integración empujados por la grave situación económica y financiera. Además, es la única opción viable ahora mismo, ya que el veto político de PSE y PP impide una fusión caliente, la primera opción que manejaba el PNV, para quien la segunda opción -tal como explicó Iñigo Urkullu en la Asamblea Regional de hace un mes- era la fusión fría.