madrid. Las entidades que necesiten ayuda pública para cumplir con los nuevos requisitos de capital que exige el Gobierno Zapatero tendrán tres meses para convertirse en bancos, mientras que aquellas que prevén salir a Bolsa contarán con un plazo de 13 meses, seis más de lo que estaba previsto. Las entidades que quieran pedir la ampliación del plazo para salir a Bolsa deberán presentar al menos un acuerdo de su Junta o Asamblea, un calendario detallado del proceso y deberán haber otorgado a una o varias entidades el mandato para dirigir las operaciones. Así se especifica en el decreto ley aprobado ayer por el Consejo de Ministros, que exige a las entidades cotizadas un capital principal del 8 o del 10 %, en el caso de las aquellas que no coticen, que superen el 20% de financiación mayorista y no hayan colocado al menos un 20 % de sus acciones entre terceros.

El secretario general de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), José Antonio Olavarrieta, aseguró que la nueva norma contribuirá a "despejar" todas las dudas generadas sobre el sistema financiero y consideró "positivo" que esta regulación no altere el nuevo modelo corporativo de estas entidades. Agregó, además, que aunque esta regulación no recoge todas las aspiraciones de las cajas, "la CECA comprende y comparte el interés del Gobierno por conseguir una mayor transparencia hacia los mercados".

Por su parte, un portavoz de la Asociación Española de Banca (AEB) aseguró que los bancos han ofrecido al Ejecutivo socialista su "colaboración activa" en todo el proceso de reforma financiera, por lo que apoyan cualquier iniciativa que implique profundizar en la reestructuración y que los bancos "cumplen o están en perfectas condiciones de cumplir los requisitos de capital establecidos". Según se indica en el texto aprobado ayer, los instrumentos que se incluyen en el capital principal serán el capital, las reservas, las primas de emisión y los ajustes positivos por valoración.