vitoria. Sólo el tiempo decidirá el valor real de la misión institucional que el lehendakari, Patxi López, ha llevado a cabo en los últimos días en los Emiratos Árabes y Qatar junto a 80 empresas vascas. Pero a priori, en un análisis en caliente, esta vez da la sensación de que el viaje ha merecido la pena. O al menos esa es la idea generalizada con la que ha regresado la expedición vasca. Una idea, eso sí, que exige la cautela y la prudencia necesarias para estar a la altura de estos dos países, acostumbrados a negociar sin agobios ni prisas, de forma pausada, casi eterna.

Con estas coordenadas en la maleta regresó el pasado viernes la expedición vasca. Cargada de un optimismo contenido, con todas las puertas abiertas. "Debemos ponernos a trabajar ya, en caliente, y aprovechar los contactos que acabamos de conseguir", apremió López a su equipo de Gobierno y las empresas desplazadas. De ello dependerá también el futuro, continuó, de muchas firmas auxiliares que cada día cuelgan de los contratos que firman compañías tractoras como Sener, CAF, Iberdrola, Aernnova o Irízar.

Sin embargo, al contrario que Brasil y China, un gesto o un detalle insignificante pueden alimentar o echar al traste cualquier proyecto debido a la idiosincrasia propia de un país tan peculiar. Pero estas son las reglas del juego allí. Por eso medio mundo, incluido Euskadi, trata de hacer negocios en este gran océano de petrodólares. "Tienen la manguera de hacer dinero (petróleo y gas) y lo saben, así que pueden elegir al cliente que más les guste. Por eso todo el mundo estamos aquí buscando sus inversiones", reconocía a este periódico uno de los empresarios vascos desplazados a la zona.

¿Sirven las recomendaciones? En esta feroz competencia, cualquier detalle cuenta. Desde un buen feeling a primera vista con el interlocutor árabe de turno, hasta una conversación agradable sobre fútbol o una carta de recomendación. Patxi López, por ejemplo, llevó una del rey de España con remite al Emir de Qatar, amigo personal, conminándole poco menos que a tratar con cariño a la expedición vasca.

¿Servirán de algo este tipo de mensajes encubiertos? Sólo el tiempo lo dirá, pero la realidad y los hechos parecen demostrar que sí. Que todo, por minúsculo que pueda parecer, suma. Al menos eso es lo que le ocurrió a Sener, que ya recibió el empujón real en 2007 cuando visitó la zona. Hoy, cuatro años después, la compañía que preside Jorge Sendagorta está a punto de construir en Abu Dhabi dos plantas para generar electricidad por 460 millones de euros. Guste o no, así se negocia en un país que en estos momentos dispone de 1,3 billones de dólares en la cartera para invertir.

Desde el inicio de las primeras reuniones institucionales entre el lehendakari y los representantes árabes, las sensaciones fueron buenas, "positivas", pero poco más que eso. Todas se resumían en una especie de "¿qué hacen ustedes? y gracias por venir" que alimentaba la incomodidad ante un destino incierto. Pero conforme fueron avanzando los días, los encuentros entraron en una nueva fase. Se pasó de la declaración de intenciones a la concreción. El primero que lo exigió así fue el príncipe heredero de Qatar, Mohammed Bin Hamad Al-Thani, cuando acordó con López la creación de una comisión bilateral de trabajo para atraer inversiones árabes a Euskadi y viceversa, fundamentalmente a empresas vinculadas con las nuevas tecnologías, la energía verde, la salud o incluso la actividad logística. Fue, sin duda, la parte más sustancial de la expedición.

un fondo de 800.000 millones Sin embargo hubo más compromisos que la expedición vasca arrancó a las diferentes familias árabes. Así, en los próximos meses acudirán a Euskadi los primeros espadas de algunas de sus compañías más importantes. En mayo, por ejemplo, recalará el presidente del fondo soberano Mubadala, el brazo financiero del país con unas reservas de 800.000 millones de dólares. Khaldoon Khalifa Al Mubarak aprovechará su visita a Sevilla para inaugurar la planta termosolar que Sener está a punto de concluir y de la que es socio, para desplazarse al País Vasco y conocer de primera mano la realidad del tejido empresarial vasco. También acudirá poco después un alto representante de la Fundación Qatar, que recorrerá los diferentes centros tecnológicos y se interesará por la subsede de la Fuente de Espalación de Neutrones que se construirá en Bilbao.

Por último, el director general de Masdar City, la que pretende ser la primera ciudad del mundo 100% ecológica y en la que se invertirán 25 billones de dólares, volverá a Euskadi en octubre -ya estuvo en 2009 en el BEC- para participar esta vez en la versión europea de la Cumbre Mundial de la Energía.