madriD. El Gobierno y los agentes sociales han comenzado a dar forma y a concretar la negociación para un pacto social y económico más allá de la reforma de las pensiones al incluir en las conversaciones a personal técnico y añadir otros temas como la innovación. Como viene siendo habitual en este proceso las partes siguen evitando dar detalles de lo que se negocia y mantienen el secretismo en torno a la cita porque no quieren que los medios interfieran. No obstante, ante la proximidad de la aprobación de la reforma de las pensiones el próximo día 28, las negociaciones se reanudarán previsiblemente hoy y está previsto que los encuentros se produzcan con "cierta intensidad" a lo largo de toda la semana.

Tras un almuerzo, los interlocutores se volvieron a reunir ayer hasta aproximadamente las siete de la tarde y hablaron, según un comunicado conjunto, de la reforma de las pensiones, del desarrollo de la reforma laboral y las políticas activas de empleo. Además, incluyeron las políticas industrial y energética y cuestiones vinculadas al área de ciencia e innovación.

A pesar de las dificultades de esta negociación todas las partes han expresado su voluntad de alcanzar el pacto, deseo al que se sumó ayer el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, quien afirmó que "será muy bueno para España".

Como en anteriores encuentros, al de ayer asistieron el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, y el presidente de la CEOE, Juan Rosell. Por parte de la patronal, además de Rosell, acudieron el presidente de CEPYME, Jesús Terciado, y el secretario general de la CEOE, José María Lacasa.

El ejecutivo además ha expresado su intención de incorporar al proceso negociador a todas las fuerzas políticas, deseo compartido por la patronal y los sindicatos. Sin embargo, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, aseguró que a ellos aún no se les ha ofrecido.