Vitoria. Era algo que se veía venir. La alta velocidad ferroviaria ha terminado por enterrar definitivamente a los vuelos comerciales de Foronda, que a partir de ahora podrá centrarse todavía más en el nicho de mercado en el que es referente, la carga aérea. Después de varios amagos y en vista de un análisis empresarial "lamentablemente certero", la compañía valenciana Air Nostrum anunció ayer a través de un comunicado que a partir del 1 de marzo del año que viene suspenderá su ruta diaria con Madrid, un enlace que se inició en abril de 2005 con dos vuelos diarios y que tres años después se redujo a uno. También la ruta con Barcelona fue suspendida el pasado año por la misma falta de demanda en el aeropuerto alavés.
Malas previsiones Con la marcha de Air Nostrum se pone fin no sólo a cinco años de relación comercial, sino que muere el tráfico comercial de Foronda, reducido a partir de ahora al lanzamiento puntual de algún vuelo chárter, especialmente en los meses de verano. La compañía aérea reconoció ayer que el cambio de programación en su ruta obedece a una decisión empresarial tomada como consecuencia de la "débil respuesta de la demanda" ante la oferta de la compañía. A las malas previsiones de ocupación hay que sumar, además, el fuerte y continuado descenso del ingreso medio por pasajero. Según confirmaron fuentes de la empresa, la caída de pasajeros en el último año en Vitoria fue del 17%, mientras que la ocupación media de cada aeronave ascendió al 38%. "En estas condiciones resulta inviable seguir operando desde Foronda", reconoció ayer un portavoz de Air Nostrum.
El descenso a los infiernos del tráfico comercial de Foronda y el resto de aeropuertos de Aena coincide con el repunte y la apuesta por parte de los Gobiernos central y autonómicos por la alta velocidad. Trayectos más rápidos, cómodos y, sobre todo, baratos, son las tres claves que, de momento, están logrando alterar rutas históricas tan consolidadas como la del puente aéreo Madrid-Barcelona, por ejemplo.
Vitoria y Foronda no han sido una excepción. Los datos así lo demuestran. A día de hoy, el 80% de los pasajeros alaveses que se desplazan a la capital del Estado utilizan el Alvia S-120 para hacerlo, y el porcentaje continúa subiendo. En apenas 3 horas y 40 minutos cualquier ciudadano es capaz de conectar las estaciones de ambas capitales por a penas 36 euros, frente a los 51 euros mínimos del avión, que pueden dispararse incluso hasta los 300 euros. El consejo de VIA, la sociedad para la promoción de Foronda, tiene previsto reunirse en breve para analizar este vacío comercial.