BRUSELAS. Los parlamentarios reclamaban inicialmente una subida del 6,18% en el presupuesto de la UE para 2011 respecto a las cuentas de este año, mientras que la mayoría de Gobiernos consideró este incremento "inaceptable" y pidió limitarlo al 2,9% en línea con las medidas de austeridad que han adoptado los Estados miembros para hacer frente a la crisis de deuda.

No obstante, la Eurocámara acabó dando marcha atrás en sus exigencias y aceptó moderar el aumento del presupuesto al 2,9% como pedían los Gobiernos. Pero a cambio, pidió tener más poder en la negociación del futuro marco presupuestario de la UE después de 2013 y también en las discusiones sobre un posible impuesto europeo para financiar las arcas comunitarias.

Sin embargo, una minoría de Estados liderados por Reino Unido y Países Bajos han rechazado de nuevo las demandas de la Eurocámara por considerar que van más allá de lo previsto en el Tratado de Lisboa. Estos países tampoco han aceptado la exigencia del Parlamento de incluir en los presupustos de 2012 y 2013 una reserva de flexibilidad del 0,03% del PIB comunitario, que se utilizaría para financiar proyectos como el Iter. Ello ha provocado la ruptura de las negociaciones.

"Lamento que unos pocos Estados miembros hayan cerrado la puerta a un acuerdo sobre el presupuesto de 2011", ha dicho el presidente de la Eurocámara, Jerzy Buzek. "La intransigencia de unos pocos Estados miembros socava la confianza de nuestros ciudadanos en que la UE trabaja de forma eficaz", ha resaltado.

Por su parte, el comisario de Presupuestos ha señalado que la falta de acuerdo es "muy lamentable" porque "retrasará la financiación de importntes iniciativas e inversiones en los Estados miembros".

Ahora le corresponde a la Comisión presentar una nueva propuesta de presupuesto de la UE para 2011 para iniciar de nuevo las negociaciones. Hasta que se alcance un acuerdo, se aplicará el sistema denominado "doceavo provisional". Ello significa que cada capítulo del presupuesto se financiará mensualmente hasta un máximo de la doceava parte de los créditos que se le consignaron en 2010.

Pero las partidas nuevas, como el Servicio de Acción Exterior o las autoridades europeas de supervisión, no tendrían financiación, a menos que se adopten correcciones.

En todo caso, el presupuesto de la UE para 2011 se ha incorporado a la agenda de la cumbre de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE que se celebrará los días 16 y 17 de diciembre.