MADRID. Dicho informe ha sido elaborado para que, una vez finalice el trámite parlamentario y las reuniones del Pacto de Toledo en relación a la reforma del sistema de pensiones, se puedan analizar en el diálogo social los aspectos, a su juicio, más importantes del mismo: edad de jubilación, cómputo de años para calcular la pensión y número de años de cotización para calcular la cuantía.

Los empresarios aseguran que, en tanto que el sistema español sólo tiene en cuenta los últimos años de la vida laboral, que suelen coincidir con los de mayores ingresos, lo que hace es "sobrevalorar" las aportaciones de los trabajadores respecto a las pensiones que puedan recibir.

"Se pone de manifiesto que España presenta uno de los sistemas más desequilibrados de la UE", argumenta la patronal, que, por otro lado, también apuesta por extender a toda la vida laboral el periodo necesario para alcanzar la pensión máxima, más allá de los 35 años actuales.

En este caso, el informe explica que el periodo de la vida laboral para calcular la pensión completa permite tener un sistema más contributivo y favorecer su sostenibilidad a largo plazo, y pone como ejemplo países como Italia, Francia, o Reino Unido, donde este periodo no baja de los 40 años.

En tercer lugar, la patronal entiende que el sistema de pensiones español debe extender la edad de jubilación, habida cuenta del aumento de la esperanza de vida, así como favorecer los sistemas de pensiones complementarios.

LOS RIESGOS ANTES DE 2060

En resumen, la CEOE apunta que el sistema español se encuentra de media en la edad legal de jubilación respecto a la UE, entre los que necesitan menos años para obtener la pensión completa y entre los que tienen en cuenta menos años de cotizaciones para obtener la pensión.

"Por tanto, el sistema español genera más estímulos para cotizar menos años y en una menor proporción sin que ello pueda tener un impacto en la reducción de las pensiones", añaden.

En esta situación, la CEOE considera que el tiempo apremia y es preciso poner en marcha las reformas propuestas. Concretamente, con datos de la UE, explica que entre 2007 y 2060, el gasto de España en pensiones públicas aumentará un 6,7 del PIB, desde el 8,4% al 15,1%, mientras que en la zona euro sólo lo hará en 2,8 puntos porcentuales.

Además, apunta que entre 2006 y 2046, la tasa de reemplazo de las pensiones --ingresos percibidos en el primer año de jubilación respecto de los ingresos en el último año de vida laboral-- descenderá en España en 12 puntos porcentuales, frente a los 2,8 puntos de la eurozona.

A modo de ejemplo, la CEOE concluye que sólo con un retraso de la edad de jubilación de los 65 a los 67 años, se aumentaría esta tasa de reemplazo en España en tres puntos porcentuales.