madrid. El Gobierno admite que su propuesta de reforma de pensiones que prevé la prolongación de la edad de jubilación a los 67 años y que actualmente debate el Pacto de Toledo pueda ser modificada por los grupos parlamentarios, al tiempo que confía en que las recomendaciones finales estén listas en dos meses. El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, también aseguró a los pensionistas que las pensiones seguirán subiendo "en la misma línea en la que lo han hecho en los últimos años" una vez haya pasado el "bache económico" y se haya corregido el déficit.

Celestino Corbacho, al término de su comparecencia ante la Comisión del Pacto de Toledo, donde explicó la suspensión de la revalorización de las pensiones contributivas en 2011, dijo que el Gobierno es consciente de que, cuando envía un documento con propuestas para someterse a análisis, "puede sufrir modificaciones" y aseguró que considerará más las recomendaciones "por consenso y acuerdo" que emita la Comisión del Pacto de Toledo que el mantenimiento de los planteamientos que propone el Ejecutivo.

No obstante, dijo que confía en que las propuestas de esta comisión "no desnaturalicen" demasiado el documento del Gobierno y "no signifiquen renunciar absolutamente a todas las materias que plantea como necesarias" para garantizar la sostenibilidad del sistema de la Seguridad Social a largo plazo.

Durante su comparecencia, Corbacho abogó por "no demorar en exceso" una reforma de las pensiones y pidió a los grupos parlamentarios que adopten sus recomendaciones en un "medio plazo".

Reiteró el "estado de buena salud financiera" y dijo que confía en "las buenas conclusiones" del Pacto de Toledo para promover reformas "paulatinas y progresivas".

"Lo que decida la comisión del Pacto de Toledo para orientar la reforma de las pensiones serán sin duda las decisiones que el Gobierno llevará a término", aseveró.

El ministro reiteró que la suspensión de la revalorización de las pensiones para 2011 responde a la necesidad de acelerar la reducción del déficit público y reducir el gasto y añadió que es una medida "puntual".

Además, aseguró que, cuando España salga de este "bache", el déficit se haya corregido y la economía inicie una senda de crecimiento, "el Gobierno sabrá adoptar medidas para compensar aquellas que tuvo que ajustar en el momento de coyuntura".