En estos tiempos, el pago con aplicaciones móviles y tarjeta bancaria ha desplazado casi por completo al dinero en metálico. Sin embargo, en el día a día de muchas personas, este sigue siendo el método más común, por lo que los cajeros automáticos continúan siendo tan importantes como hasta ahora

Aun así, hay que recordar que también pueden suponer algunas desventajas. Una de ellas es que son el objetivo preferido de muchos delincuentes, así como fuente de algunas estafas y errores técnicos. Por eso mismo, conviene dominar ciertos hábitos para protegerse. 

Un gesto sencillo que puede evitar un fraude

A diferencia de lo que se cree, la clave para evitar posibles estafas es bastante simple. Se trata, nada más y nada menos, que usar el botón “cancelar” que aparece en la pantalla de estos dispositivos. De hecho, tiene más funciones de lo que parece. 

Al hacer una transacción en un cajero automático, el sistema abre una sesión temporal durante varios segundos. En este lapso de tiempo, otra persona podría acceder a la cuenta, realizar operaciones no deseadas y hacerse con información sensible. 

Por lo tanto, una vez hayamos terminado la sesión en este dispositivo, debemos pulsar el botón “cancelar” de inmediato. Aunque parezca algo que no tiene importancia, puede marcar la diferencia y asegurar la tranquilidad de nuestro dinero

Una mujer teclea su número secreto en un cajero. Freepik

Otros hábitos para mantener tu información a salvo

Dejando a un lado esta medida, hay otras que pueden resultar muy útiles para desenvolverse con un cajero automático. Una de ellas es pedir siempre el recibo de la operación, donde hay datos clave de la transacción realizada. 

Asimismo, cubrir el teclado mientras se escribe el número PIN, puede impedir que las cámaras ocultas o espías que ronden cerca se puedan hacer con él. Se puede utilizar la mano, la cartera, o incluso una prenda, para tapar el teclado. 

Por otro lado, la estructura del propio cajero automático es un factor importante. Es decir, si hay partes mal encajadas, con la ranura estropeada, o la pantalla y los botones deterioradas, es mejor no utilizarlo y recurrir a otro para operar con seguridad. 

Cabe destacar que el entorno también es algo que debemos vigilar. A ser posible, es mejor no retirar dinero en zonas apartadas y con poca iluminación. Y, si es posible, hacerlo siempre de día y en áreas transitadas. 

Una mujer introduce la tarjeta en la ranura del cajero automático. Freepik

Cambios para sacar dinero

El próximo 28 de junio, cambia la manera de sacar dinero tal y como hasta ahora lo conocíamos. Y lo hará debido a la implementación de una serie de modificaciones que recoge la ley de accesibilidad bancaria.

Esta norma obliga a todas las entidades financieras y bancarias a adaptar sus cajeros automáticos para hacerlos mucho más accesibles. Así las cosas, cualquier persona, independientemente de su condición física, intelectual o sensorial, será capaz para operar en ellos sin dificultades.

Entre las principales modificaciones para los cajeros, que se pueden ver en la Ley 11/2023, de 8 de mayo, se encuentran la siguientes: "Asistencia multisensorial, botones accesibles, nueva interfaz y ubicación accesible".