Este invierno ha sido inusualmente seco y cálido en los Pirineos, limitando las oportunidades para practicar la escalada en hielo. Ante la falta de condiciones adecuadas, Eneko e Iker Pou decidieron buscar el hielo lejos de casa. Su destino fue el Sudtirol, en el corazón de las Dolomitas, una región montañosa del norte de Italia donde las temperaturas han permitido la formación de espectaculares cascadas congeladas, el escenario perfecto para poner a prueba su técnica y resistencia.

Las Dolomitas, eso sí, no eran un territorio desconocido para los hermanos alaveses. En el pasado, ya habían dejado su huella en la zona con ascensiones estivales de gran exigencia, como la icónica Panaroma (8c, 550 m) en la Cima West de Lavaredo o la mítica The Fish (7b+, 900 m) en la cara sur de la Marmolada. Sin embargo, nunca habían experimentado la montaña invernal en este rincón de los Alpes, donde el paisaje cambia por completo y la escalada adquiere un carácter radicalmente diferente.

Los hermanos Pou, en las Dolomitas. Cedida

La misión de los Pou en esta ocasión no era enfrentarse a la roca, sino al hielo de fusión, estructuras efímeras formadas por la congelación del agua de las cascadas. Entre todas las ascensiones realizadas, tres han marcado especialmente la expedición. La primera de ellas fue Eigestein, una imponente columna de hielo de más de treinta y cinco metros totalmente verticales. Nunca antes los hermanos se habían enfrentado a un reto así.

Los hermanos Pou, en las Dolomitas. Cedida

Muy cerca de esta ruta, Eneko e Iker escalaron también Movieland, una cascada helada de gran dificultad, con una segunda sección que exigió el máximo esfuerzo y precisión. Ambas se encuentran en el Geopark, un pequeño valle de ensueño, que en invierno se congela, dejando por doquier estas impresionantes cortinas heladas. Por último, el tercer gran desafío del viaje fue Crazy Diamond, una vía mixta de roca y hielo de ciento ochenta metros, considerada una de las más difíciles que han afrontado hasta ahora en este estilo.

Además de estas ascensiones estrella, los Pou también han completado otras rutas de gran interés, como Rechter Eisfall, Spada di Damocle o Franziskus Eisfall, consolidando así un viaje que no solo ha sido una aventura en sí misma, sino también una preparación fundamental para futuros retos en alta montaña. Para los escaladores, dominar la técnica del hielo es una parte imprescindible de su preparación, pues, en las grandes montañas del mundo, las expediciones exigen moverse en un terreno cambiante.