El atletismo alavés está dejando huella a nivel estatal. Avril Gómez, la prometedora atleta vitoriana del Barrutia, se proclamó recientemente campeona de España Sub-18 en la prueba de 60 vallas disputada en Sabadell. Una hazaña que le sirvió para poner el broche de oro a la temporada en pista cubierta y que la gasteiztarra rememora con orgullo.
Después de sumar títulos a nivel territorial, tanto en Álava como en Euskadi, Avril Gómez estrenó su casillero a nivel nacional subiéndose a lo más alto del podio. “Ha sido mi primera medalla en un campeonato nacional, y encima de oro. Estoy súper contenta. En ese instante no sabía cómo expresarme, no supe asimilarlo. Es fácil decir que eres campeona de España, pero tengo mucho trabajo por detrás con días en los que no me salían las cosas y tenía que seguir entrenando”, recuerda Avril Gómez.
La joven atleta alavesa define su paso por el Estatal de Sabadell como un ejercicio de madurez en el que fue de menos a más. “Al principio sí que noté la presión, pero después de las eliminatorias me fui soltando y tuve más seguridad en mí misma. Fue romper el hielo y en las demás carreras me fue muy bien. Me gustó tener competencia y que hubiera mucha igualdad”, destaca Avril Gómez.
“Las vallas me motivan porque es una disciplina de entr enamiento, no sale a la primera”
La gasteiztarra, cosecha del 2007, probó el atletismo a los seis años de edad en el Barrutia. Y ahí sigue diez años después, consolidada ya como una atleta de gran potencial en las vallas. “Antes del atletismo practicaba gimnasia rítmica, pero no era lo mío. Mi abuela, en mi pueblo, me apuntaba a natación y la monitora le dijo que era rápida. Se lo contó a mi padre, que investigó el atletismo y vio que había equipos en Vitoria. Entonces empecé las pruebas en el Barrutia a los seis años”, cuenta Avril Gómez respecto a sus inicios.
La alavesa hizo sus primeros pinitos combinando varias disciplinas del atletismo. No obstante, ni ella ni los entrenadores del Barrutia tardaron tiempo en darse cuenta de que las vallas eran su terreno ideal. “Me dijeron que tenía buenas condiciones para las vallas y que era rápida. Eso me motivó a practicarlo y me fue gustando cada vez más. Las vallas me motivan porque es una cuestión de entrenar, no es algo que salga a la primera de cambio”, puntualiza.
Pese a su juventud, Avril Gómez tiene las ideas claras y es consciente de que los éxitos están ligados a la constancia en la preparación física y mental. “Entreno cuatro o cinco días a la semana. Lo llevo bien porque me organizo. No hay ningún problema si tienes las ideas claras, pero hay que hacer sacrificios”, explica la alavesa. “Los estudios los llevo bien y tengo tiempo para quedar con las amigas. Los entrenamientos me ayudan a despejarme”, agrega la atleta, quien cursa Primero de Bachillerato.
“Entreno cuatro o cinco días a la semana; no hay problema, pero hay que hacer sacrificios”
Ambición máxima
Avril Gómez no se conforma con el oro en el sub-18 estatal ya que quiere sumar nuevos trofeos a su vitrina. “Tengo por delante los 100 metros vallas, me gusta más que la prueba de 60. Intentaré mejorar mis marcas porque me veo bien físicamente y no tengo ninguna molestia”, apunta la alavesa, quien se siente “más cómoda” en el ejercicio de aire libre que en pista cubierta.
La atleta del Barrutia, de madre paraguaya y padre alavés, reconoce haberse puesto en alguna ocasión en la tesitura de decidir a qué país representar. Sin embargo, Avril Gómez considera que “todavía es pronto” para tomar una decisión y que lo más importante es seguir quemando etapas. “No creo que esté en una posición para elegir, lo primero es mantener la categoría con el equipo y seguir con mis pruebas”, añade.
Eso sí, Avril confiesa cuáles son sus sueños en esto del atletismo. “Me gustaría participar en un campeonato internacional. Participar en unos Juegos Olímpicos sería un sueño, pero ahora hay que seguir trabajando”, concluye la prometedora atleta del Barrutia.
