STURM GRAZ Siebenhandl; Gazibegovic (Jager, min. 73), Affengruber, Wuthrich, Dante; Kuen (Ljubic, min. 66), Stankovic, Prass (Hierlander, min. 38), Niangbo (Geyrhofer, min. 65); Jantscher y Yeboah (Sarkaria, min. 73).

REAL SOCIEDAD Remiro; Gorosabel (Zaldua, min. 62), Zubeldia, Le Normand, Muñoz; Zubimendi (Guevara, min. 18), Merino, Silva (Sorloth, min. 62); Januzaj (Turrientes, min. 75), Portu e Isak (Lobete, min. 77).

Gol 0-1, min. 67: Isak.

Árbitro Tobias Stieler (Alemania). Expulsó en el minuto 86 a Stankovic por doble amarilla. Amonestó a Gorosabel, Zubeldia, Merino y Guevara.

Estadio Liebenau de Graz. 10.000 aficionados, con presencia de unos 600 de la Real.

- Un gol del sueco Alex Isak, tras un fallo enorme del portero del Sturm Graz, Jorg Siebenhandl, le dio a la Real Sociedad su primer triunfo en la Liga Europa y acceso a la segunda plaza de grupo. Dominó la Real el primer tiempo, con clara vocación de marcar y bajar las pulsaciones del juego de un rival muy motivado mientras el empate estaba vigente, pero los donostiarras no acertaron en las ocasiones que tuvieron para irse con ventaja al vestuario.

David Silva, que volvía al equipo tras cinco semanas de baja, asumió protagonismo en este período y tuvo una clara oportunidad para haber desnivelado el marcador en los primeros minutos. Isak, en ausencia del internacional Oyarzabal, tiraba del carro en los últimos metros. Lo intentó en varias ocasiones el delantero sueco pero como no estaba fino, Siebenhandl y la defensa austríaca le ganaron la partida. Imanol Alguacil, en un año aciago con las lesiones, perdía enseguida a Zubimendi, por lesión, lo que complicó los planes de un conjunto txuri urdin que se espesaba en ataque en un intercambio de posesiones con poco sentido para uno y otro equipo.

La Real dio un paso adelante en el segundo tiempo y llegó la gran ocasión de Merino, en un saque de falta de Januzaj que el navarro cabeceó con habilidad al palo largo de Siebenhandl y el poste salvó al portero austríaco de encajar el primero. Siebenhandl salvaría nuevamente a los suyos al abortar un gran remate de Aihen Muñoz cuando la Real estaba ya desatada en busca del triunfo.

El cancerbero del Sturm Graz es humano y, en el único fallo que tuvo, Isak aprovechó para marcar el gol de la victoria en un remate sin peligro que Siebenhandl se tragó de forma incomprensible para hacer justicia a los méritos contraídos por el equipo blanquiazul. El canterano Turrientes envió un remate al larguero en el descuento.