- La selección española femenina de waterpolo alcanzó la segunda plata olímpica de su historia tras caer, como en Londres 2012, ante la todopoderosa Estados Unidos, que no le dio al cuadro de Miki Oca ni la más mínima opción a soñar con el oro (5-14). Las norteamericanas, absolutas dominadoras del waterpolo mundial en la última década, logran su tercer título olímpico consecutivo tras los de la capital inglesa y Río 2016, a los que añade en un palmarés espectacular los tres mundiales, obtenidos en Kazan 2015, Budapest 2017 y Gwangju 2019, estos dos últimos también ante España.
El equipo de Adam Krikorian trituró de salida a España y sentenció el triunfo con el 1-6 con el que se situó al inicio del segundo cuarto. El conjunto de Miki Oca se negó a rendirse, aspiró a la remontada antes del descanso, pero el 3-6 o 4-7 no fue más que un espejismo. De vuelta al agua, el tercer parcial, de 0-5, fue ya absolutamente demoledor y acabó absolutamente con la final (4-12). Las norteamericanas estaban advertidas desde la inesperada derrota en la fase de grupos ante Hungría. A partir de ahí sacaron el rodillo y no lo soltaron hasta volver a proclamarse campeonas olímpicas. Aunque las españolas aseguraban que habían aprendido la lección de Londres y que esta final no era una misión imposible, se volvió a repetir la historia.