- El tenista balear Rafa Nadal ganó ayer al griego Stefanos Tsitsipas (6-4, 6-7 y 7-5) en la final del Trofeo Conde de Godó y sigue ampliando su dominio en un torneo que ha conquistado ya en doce ocasiones. Sigue dominando en su club, en su pista Rafa Nadal, y sigue sin perder una sola final de las disputadas en Barcelona. Sus derrotas han sido previas a una lucha por el título donde, hasta en doce ocasiones, siempre ha ganado. Esta vez, además, a un Tsitsipas que no había cedido un solo set en Barcelona.
Nadal empezó con mal pie el partido, que era una reedición de la final de 2018. Pero fue de menos a más, estuvo firme en su golpe de fondo de pista, más acertado en las dejadas que su rival y resistió hasta acabar imponiendo su juego y anular el vendaval griego que venía siendo Tsitsipas, ganador en el Masters 1000 de Montecarlo, en un partido larguísimo en el que ambos tuvieron bolas de torneo en tres sets de gran nivel.
Al final del segundo set, con 5-4 a favor de Nadal, el de Manacor tuvo dos bolas de partido con saque del griego, pero desaprovechó ambas ante la valentía del rival. Después, con su saque, remontó un 0-40 para seguir arriba 6-5, pero no pudo quebrar al actual número 5 del mundo y la manga se fue al tie break. Una muerte súbita donde el primero en ceder su saque fue Tsitsipas, pero Nadal encadenó dos errores con su saque y, a la tercera bola de set para el heleno, fue la definitiva. Empate en el marcador y la final se iba a un tercer y definitivo set, buscando la proeza balear o camino de la tragedia griega. Tsitsipas logró hacer lo que únicamente había hecho previamente el ahora director del torneo, David Ferrer; anotarse un set ante Nadal en una final del Godó.
En el momento de la verdad, tanto Nadal como Tsitsipas guardaron bien sus saques. Pero, en el quinto de Nadal, el griego tuvo una bola de partido, la primera para él, que salvó un manacorí agresivo en los momentos clave y que subió con criterio a la red. Con 5-5, se mascaba un nuevo tie break. Servía Tsitsipas, y Nadal tuvo cuatro bolas de rotura. En la cuarta, Tsitsipas se hundió y la mandó fuera, dejando a Nadal sirviendo para cerrar el partido. El griego pasó del 30-0 al 30-40, y Nadal cortó la reacción. En el deuce, se puso arriba en su tercer match ball y Tsitsipas volvió a irse largo. Nadal sellaba su victoria y su docena de títulos en Barcelona.