- Iker Irribarria (Arama, 1996) comenzó ayer mismo la rehabilitación para recuperar la rótula de su rodilla derecha. El pasado 11 de marzo fue intervenido por el doctor Mikel Sánchez en el hospital Vithas de Gasteiz y todavía no se conocen los plazos de recuperación.

Han pasado dos semanas desde que fue intervenido. ¿Cómo se encuentra?

—Estoy bien. En los primeros momentos de la operación tuve un par de instantes malos, pero no fue nada fuera de lo normal. Lo estoy llevando bastante bien, la verdad. Por suerte, tengo en casa bastante ayuda. Intento dar unos paseos por el pueblo y estar tranquilo. Además, he empezado ya con la rehabilitación y solo me queda trabajar.

¿Le han comentando ya cuáles son los plazos de recuperación y de trabajo con los que cuenta?

—No los sabemos. Se trata de una lesión de rodilla rara; así que no conocemos bien cuál va a ser el camino. Mientras tanto, estoy llevándolo bien y lo más importante es recuperarse.

¿Está teniendo dolores?

—Ninguno. Durante los primeros días después de ser intervenido sí que tuve un par de momentos malos. Desde entonces, no he sentido nada.

Usted juega con dolor hasta que el 31 de enero en Bilbao disputa su último partido. Entonces, tuvo que parar por mal de manos, pero la rodilla le seguía dando guerra.

—Fue duro tener que parar. El pelotari quiere jugar, estar en la cancha. Cuando te cuesta cada vez más recuperarte y te comienzan antes los dolores, es complicado continuar. Ahí fue cuando tomamos la decisión de mirarlo bien y preguntar al que más sabe de esto.

Es entonces cuando desaparece la incertidumbre sobre qué es lo que tiene en la rótula. Existe la resignación de pasar por el quirófano, pero sabe que hay un solución. ¿Se quitó un peso de encima?

—Eso es. Cuando ya te dan una solución, por dura que sea, sabes lo que hay. Si con esto hemos conseguido arreglar la rodilla, estoy contento.

Si bien todavía no se conoce cuánto tiempo tendrá que estar en barbecho, ¿cómo cree que va a llevar el estar parado?

—Creo que tengo que tomarlo con humor y con cosas que hacer. En principio, solo en la rehabilitación me va a tocar pasar tres horas al día. Después, tengo que hacer unas cuantas prácticas; así que creo que se me pasará bastante rápido. Cuanto más ocupado esté, mejor.

¿Desconectará de la pelota a mano profesional o seguirá enganchado a la evolución de los compañeros?

—Le seré sincero: cuando me transmitieron que no tenía plaza en el Campeonato de Parejas, sí que me costó. Sin embargo, estoy trabajando mentalmente, aprendiendo poco a poco, y desde que empezó el torneo he tratado de ver todos los partidos o, al menos, los que he podido. He conseguido disfrutar viendo a los compañeros. Eso es complicado en un deportista.

La operación de la rótula es un golpe como pelotari, pero lo cierto es que en el último año y medio ha vivido varios. ¿Lo toma como un aprendizaje para fortalecerse?

—Tengo que aprender. Aún tengo 24 años. Es complicado recibir esos golpes, pero creo que de todos he salido fortalecido. Aun así, estoy trabajando a diario y eso no lo voy a dejar de lado.

¿Va a estar disponible para jugar la presente edición del Manomanista, cuyo inicio está previsto para mediados de mayo?

—Querría, pero lo veo complicado. Al final, está casi encima. Apenas quedan dos meses para el inicio, pero va a ser difícil. Lo intentaré; aun así, no me debo obsesionar con ello. Lo más importante es mi rodilla: tengo que escuchar a mi cuerpo y no precipitarme.

Su principal objetivo es recuperarse al cien por cien. No es solo cuestión de tener bien la rodilla, sino que después hay que ponerse a tono.

—Eso es. Además, para poder jugar a pelota a alto nivel hay que trabajar mucho. No se trata solo de hacer vida normal, sino de que soy deportista y es complicado ponerse. Si tengo que renunciar, me dará pena, pero me voy mentalizando. Estoy tranquilo, porque en la balanza está dejar este Manomanista y recuperarme o jugar mal y perderme otras ediciones.

“Al decirme que no tenía plaza en el Parejas, me costó ver partidos, pero poco a poco he logrado disfrutar”

“Si hay que sacrificar esta edición del Manomanista para estar bien en el futuro, lo haremos”

“En los primeros días tras la operación tuve un par de momentos malos; ahora, en cambio, me siento bien”