- El Barça afronta una semana clave para decidir el calendario del voto de censura contra el presidente Josep Maria Bartomeu y su junta directiva, mientras el club ha presentado una denuncia a la Guardia Civil por posibles irregularidades en algunas firmas, circunstancia que los impulsores del mismo consideran que no impedirá que el proceso siga adelante. "No tiene ni pies ni cabeza intentar paralizar el voto", sentencia a Efe Jordi Farré, precandidato a las elecciones del Barcelona y responsable jurídico del voto de censura.

"A nosotros nos pidieron 16.521 firmas buenas como requisito para tirar adelante el proceso y hemos conseguido 19.532. Lo que están haciendo ahora es una estrategia que se les ha ido de las manos, están matando a Ramón Gómez-Ponti (el jefe de los servicios jurídicos del club) por todos lados. Aquí seguro que no se paraliza nada", añade.

Además de esta denuncia a la Guardia Civil, el otro contratiempo que se podría encontrar el proceso del voto de censura sería que la Generalitat de Catalunya no diese el visto bueno a la celebración del referéndum por razones sanitarias a causa de la pandemia del coronavirus.

Pero el secretario general del deporte de la Generalitat, Gerard Figueras, ya dejó claro, en dos entrevistas y por escrito, que a día de hoy no hay ningún impedimento para que se celebre la votación.

Así, ahora el club está obligado a convocar el referéndum en un periodo mínimo de 10 días hábiles y 20 como máximo. La fecha límite, según los estatutos del club, sería el 2 de noviembre.

Para decidir este asunto, la junta directiva del Barcelona debe reunirse para avanzar con el proceso, pero todavía no hay una fecha fijada. Para que se formalice el objetivo de los impulsores del voto de censura, por lo menos dos terceras partes de los socios (un 66,6%) siempre que acuda a las urnas como mínimo un 10% del censo electoral, deberán votar en contra de la continuidad de la junta directiva presidida por Josep Maria Bartomeu.